4. Meeting between two worlds

113 6 9
                                    

Labios sonrojados de color cereza que hacían juego con sus mejillas del mismo tono.

Cabellos tan dorados y rizados que parecían ser rayos del sol mismo.

Y, lo más importante, una mirada tan especial; pura, cálida y angelical.

Pero no era posible que alguien como un bandido el fuera... Así de perfecto.

-¡Kou!-Gritó una voz conocida sacándolo de su trance y haciendo que sus ojos se abrieran de golpe.

Al hacerlo, vio a su amigo Hojou a un lado suyo junto con todos los demás miembros del equipo.

Eso lo consterno aun más por lo que se vio su cuerpo viendo que estaba en bata blanca conectado a una solución fisiológica.

Eso solo significaba una cosa: Hospital.

-¿Ah? ¿Qué... qué hago aquí?

-Te encontramos inconsciente en la acera cuando estábamos buscándote porque tardaste en regresar.

-¿En serio?

-Si, lo más curioso es que no estás herido, de hecho te encontramos como si alguien te hubiera puesto ahí con mucho cuidado.

Kousuke empezó a recordar todos los eventos con aquel bandido de nombre Masahiro y se quedo helado.

El jefe lo notó y se acercó curioso.

-Oshiba-san, ¿pasó algo?

El pelinegro tuvo un debate mental ante aquella pregunta de su superior.

Ya que había encontrado a aquel bandido, entonces significaba que la base estaba cerca.

Si decía la verdad, seguramente podría guiarlos hasta el punto donde se encontraron y rastrear sin problema.

Eso haría que, de nuevo, cumpliera su misión con éxito.

Pero, la imagen y anterior encuentro con el bandido de orbes esmeralda lo confundía y hacía dudar de sus principios.

Tal vez... Si lograba encontrarlo de nuevo por su cuenta, lo podría capturar e interrogar de forma más segura.

Pero, para ello debía mantener el sigilo de lo que le había pasado, así que sonrió y trato de poner una faceta cool en su rostro.

-No, no pasó nada. Seguro que me desmayé por la presión mientras iba de regreso.

-Que bueno que fue eso, creí que algo malo te había pasado, amigo.

-Tranquilo Hojou, mejor infórmame, ¿hay algún avance en general?

-Por ahora nada, nadie pudo encontrar algo, ya veremos mañana.

-Si, tal vez mañana, tendremos suerte.

-Tranquilo amigo, mejor descansa por hoy en el hospital, mañana que te den el alta continuaremos.

-Supongo que esta vez tienes razón.

-Tsunehito-san, salgamos con sus compañeros y dejemos a Oshiba-san.

-Si Hatano-san.

Todos le dieron sus mejores deseos y salieron dejando a Kousuke con un lío completo en su cabeza.

En especial, una pregunta rondaba sus pensamientos.

¿Por qué no había atacado a aquel sucio bandido cuando tuvo la oportunidad?

+++++++++++

+++++++++++

Dos prometidos caminaban uno al lado del otro en una zona algo privada sin estar con tanta gente a su alrededor.

Don't Judge meWhere stories live. Discover now