Helena ♡.¸『BatLantern』

Pastelillos a prueba de balas

(+6 años)

Era ya una costumbre para Helena tener que vivir con dos cosas: El comportamiento de sus hermanos frente a cualquier cosa y la clara tensión sexual entre sus dos padres.

La primera, ya sabía cómo lidiar con eso, puesto que era de lo más normal tener que convivir con las extrañas ideas de hermandad por parte de los "princesos de la casa"... ¿No hace falta decir que Jordan le tiene apodos raros a casi todo, verdad?

La segunda sí que era todo un caso para ella. Podría ser una niña, pero no era en absoluto ingenua, y "evidente" era la palabra que definía la relación de los miembros de la Liga.

Y aunque quisiera seguir hablando de sus padres, su atención ahora se centraba en sus hermanos. Ellos eran todo un poema caótico.

Por un lado estaba Dick, con quien no tenía casi problemas y era el más comprensivo de todos. Aunque es insistente con algunos temas, lo que podía llegar a ser demasiado molesto.

Luego vamos con Jason, que sin duda era alguien que iba contracorriente y por magia salía casi ileso a cualquier problema, menos cuando está Hal presente, la mayoría de veces Jason termina siendo reprendido por el castaño y teniendo que remediar los desastres que hacía.

Pasamos con Tim, que era en secreto el favorito de ella, no sólo por sus dotes sino por su gran capacidad de escucha. Aunque su único defecto es lo perfeccionista que puede llegar a ser con cosas tan triviales.

Y para finalizar, Damian... Damian, es sencillamente Damian. No tiene palabras para expresar lo impredecible que era en cada situación con la que ha tenido el privilegio de vivir con él, rematando que ambos compartían, en modo competencia, buscar el cariño de Hal y la atención de Bruce.

Pero así mismo los quería, cada uno era un universo que conocer y estaba dispuesta a dar lo mejor de ella para tenerlos unidos a pesar de sus diferencias, a las buenas o a las malas.

¿Qué mejor que empezar con un aperitivo dulce, hecho por los cinco, para cuando Hal y Bruce lleguen? Sólo había que ir al supermercado a comprar lo necesario... Nada podía malir sal.

Digo, salir mal.

—¿Que Jason hizo qué? —Helena miró incrédula a Tim, esperando que lo que dijese fuera en broma.

—Jason olvidó las compras, de nuevo —dice Tim con un tono neutral mientras que a su vez se toma la molestia de rehacer la lista de compras, esta vez con mejor caligrafía y más decoraciones innecesarias.

—¡Ya dije que no fue mi culpa, fue de Grayson! —gruñó Todd mientras señalaba al nombrado.

—¿Mía? ¡Yo nunca te pedí que coquetearas con la cajera y olvidaras todo a tu alrededor!

—No le coqueteaba, le estaba pidiendo amablemente su número —se excusó de la peor manera posible, siendo derribado por el peso del cuerpo de Dick, recibiendo limpios golpes.

—¡Chicos, basta! —Helena trató de buscar un intermedio entre los dos mayores, sólo encontrando una de las varas de Dick a la mano, dejándola en medio de los dos cuerpos y accionándola para la posterior expulsión, similar a una bala, de ambos hermanos y al fin dejarlos a considerables metros de distancia. —Podemos ir esta vez juntos al supermercado y traer los ingredientes, los necesito a ambos vivos antes de que ellos lleguen

Ante la potencia con la que fueron expulsados, Dick y Jason se levantan para tomar el aire que les fue arrebatado, siendo prácticamente Jason quien llevó la peor parte, sin poder defenderse como bien sabía.

—¿Y por qué... —tomando mucho, muchísimo aire, termina: —iría con este bastardo?

—Porque somos una hermosa familia —la sonrisa de la menor escondía un terrible chantaje. Fue mucha su suerte haber estudiado el comportamiento de sus hermanos y cómo lidiar con ellos. —Y porque si no lo hacen, le diré todo con detalles a Hal, lo cual lo pondrá molesto y ustedes no quieren eso ¿O sí?