My obsession | Henry Cavill

CAPITULO 18

HENRY

Abro los ojos con dificultad debido a lo cansado que estoy, tallo mi cara con mis manos mientras miro el techo blanco, suelto un bostezo y me siento de golpe al recordar que me quede dormido con Adele, ¿como mierda me pudo pasar?, soy un completo idiota, ni siquiera con Luciana me quedo a dormir.

Suelto Un largo suspiro tratando de calmarme, el sólido de un celular entra en mis oídos, giro mi cabeza y observo la pantalla del iPhone de Adele iluminada, lo tomo leyendo el nombre de quien llama, "Stephan". Deja de sonar y a los segundos vuelve a entrar la llamada del mismo chico.

¿Para que le llama tan insistente?

me pongo de pie dejando el celular en la mesita de noche, me dirijo al baño en donde pienso encontraré a la castaña pero no es así, me lavo los dientes, peino mi cabello un poco y salgo para tomar el celular que vuelve a sonar no sin antes ponerme el pantalón de pijama en el piso.

Llegó al primer piso y lo primero que veo es a la pequeña traviesa poniendo platos con comida en la mesa, el verme sonríe.

—Buenos días— me saluda alegre.

—Adele...

—Hice el desayuno, deja voy por los vasos— se da vuelta y entra a la cocina, la sigo para no perderla de vista.

—Adele tengo que llevarte a tu casa— termina de sacar los vasos y se gira para mirarme.

—Pero te dije que hice el desayuno, comemos y me llevas— vuelve a sonreír.

—Adele no...

—Henry, si piensas que me voy a enamorar locamente de ti estás muy equivocado, ya te dije que se lo que tenemos, solo nos quitamos las ganas— me mira a los ojos.

—No quiero que te confundas— niega.

—No lo haré— pasa por mi lado —Apúrate que se enfría.

Suelto un bufido antes de seguirla, ella se sienta a mi derecha y yo en la cabecilla de la mesa. Adele sirve el jugo mientras que yo observo lo que preparo, Hot cakes con fresas arriba, leche condensada, café y jugo de naranja.

Es mi desayuno favorito.

—Se ve bueno— comentó —Es mi favorito en las mañanas.

—Lo se, siempre que ibas a desayunar con mi papá en las mañanas pedías que te preparaban esto— sonríe mirando todo —Rita me enseño a cocinar.

—¿Como sabes eso?

—Te observaba.

—Eras una bebe— ríe.

—Me gusta observar— se encoge de hombros.

Antes de comenzar a comer le extiendo su celular —¿Quien es Stephan?

—¿Por que?— toma el celular y lo deja sobre la mesa sin verlo.

—Te llamó varias veces.

—Ahh, es el novio de René— dice como si nada —Seguro me quiere para darle una sorpresa o algo así, ya después le llamo.