The Ballad of Heidi Trumbauer *ESPAÑOL* shingeki no kyojin

𝙒𝙝𝙖𝙩 𝙈𝙪𝙨𝙩 𝘽𝙚 𝘿𝙤𝙣𝙚 𝙉𝙤𝙬?

-"La hija que dejaste creció bien, Odd" -pensó Erwin. -Está bien. Comenzaremos tu entrenamiento tan pronto como te hayas recuperado. Hasta entonces, continúa como lo harías normalmente y ten cuidado al responder preguntas. Si alguien te pregunta qué estabas haciendo fuera del muro, Di que te separaron de tu escuadrón y te expulsaron cuando te encontraste con un desviado y no pudiste regresar poco después de encontrarte rodeado por los titanes dentro de Wall Maria. -le instruyó, listo para irse y lidiar con otros asuntos urgentes que requerían su atención.

-¿Pero no descubrirán que estoy mintiendo? -Preguntó Heidi, preocupada. -El líder de escuadrón con el que estaba...

-Todos los miembros del equipo de avanzada, con la excepción de ti, fueron aniquilados en los primeros minutos de la ruptura del muro. -declaró Levi con total naturalidad, mirando como sus ojos se abrían en estado de shock. Su victoria había tenido un precio muy alto. -Además, tienen peces más grandes para freír. -agregó mientras él y Erwin se volvían para irse.

-... -Heidi cerró los ojos con tristeza mientras pensaba en el escuadrón cuyos nombres ni siquiera había tenido tiempo de aprender antes de morir. -Abuelo, sé que dijiste que Sasha estaba bien, pero ¿estás seguro de que no has escuchado nada sobre Eren y el resto? -preguntó ella preocupada. Erwin y Levi se congelaron en la puerta al escuchar eso.

-¿Eren? ¿Eren Jaeger...? -Erwin preguntó mientras la miraban. Heidi los miró y se sorprendió un poco por la gravedad de sus expresiones. -¿Lo conoces?

-Sí, es un amigo... ¿Pasa algo? -Preguntó tentativamente, frunciendo el ceño con preocupación. -¿Le pasó... algo a Eren?

-Según numerosos informes, Eren Jaeger... se convirtió en un titán y selló la brecha en el muro. -respondió Erwin con cuidado mientras evaluaban su reacción. Heidi estaba realmente sorprendida.

-¿Q-Qué...? -preguntó ella, atónita. -Pero... Eren no puede ser un titán... Los odia. -dijo mientras la arruga de su frente se hacía más profundo. -Quiere borrarlos de la faz de la tierra.

-Qué irónico. -murmuró Tollak en voz baja.

-Sea como sea... No cambia el hecho de que ha sucedido. -le dijo Erwin mientras él y Levi volvían a entrar en la habitación. -Si quieres ayudar a tu amigo, te sugiero que nos cuentes todo lo que sabes sobre él, antes de que sea demasiado tarde.

-... ¿Demasiado tarde? -Heidi preguntó con cautela. No le gustó el sonido de eso.

-Tu amigo va a ser juzgado. -dijo Levi sin rodeos. -La Policía Militar quiere diseccionarlo.

-¡...! -Heidi jadeó. -¡E-ellos no pueden! -exclamó, horrorizada. -¿¡No acabas de decir que él salvó a todos!? Titán o no, ¡sigue siendo nuestro aliado! No sé qué está pasando, pero si tenemos un humano que tiene la capacidad de controlar a un titán de nuestro lado, entonces no ¿Eso es algo bueno? ¡Incluso podría sellar los agujeros en el muro Maria!

-Nosotros pensamos lo mismo. -dijo Erwin con seriedad, feliz de saber que ya estaban en la misma página. -Pero es gracias al alboroto por la situación de Eren que no están mirando muy de cerca la tuya. -Heidi apretó los puños y apretó los dientes.

-¿Qué puedo hacer? -preguntó, mirándolos con determinación ardiendo en sus ojos. -Dime. Si hay algo que pueda hacer para salvar a Eren, ¡lo haré!

-¡Tu cállate! -Tollak ladró, dándole otro golpe rápido en la cabeza. -¡No estás en posición de ayudar a nadie en este momento! ¡Solo mantén la cabeza baja y la boca cerrada!

-¡No! ¡Me niego a sentarme y ver cómo matan a uno de mis amigos solo para salvar mi propio pellejo! -Heidi respondió tercamente a su abuelo antes de mirar a Erwin y Levi con fuego en sus ojos. -Si van a salvar a alguien, ¡háganlo Eren!