—¿Crees que estemos bien vestidos?

—Eso espero.

—Oh, muero de nervios...Abraham es una celebridad en el futuro ¿te lo conté? Literal hay un monumento en su nombre y todo.

—Supongo que eso es algo bueno ¿no? Significa que es buena persona.

—Eso ya no lo sé, le hacen monumentos a cualquier persona que cause un impacto, independientemente sí fue o no una buena persona. Aunque creo que la gente quiere creer que Lincoln lo fue.

Se cambió de lugar para sentarse a su lado y se enganchó a su brazo, entrelazando sus manos.

Jonathan sonrió y acarició sus dedos y el anillo que llevaba desde su boda.

—No quiero que te angusties ¿de acuerdo? No importa cuál sea el resultado de esta reunión, debes mantener la calma —. Asintió, aunque no estaba muy segura de lograr controlarse si su plan fracasaba—. Te has estresado demasiado este último año y no quiero que enfermes.

—No moriré de estrés, de eso estoy segura...Aunque quizás quede calva.

Se llevó una mano al cabello y Jonathan rio por su expresión de horror.

—Te verías hermosa de todas formas.

Consiguió sonrojarla y hacerla sonreír y cuando ella se acercó a su pecho para abrazarlo, la rodeó con sus brazos y recostó su mejilla sobre el sombrero que traía. Olivia miró por la ventanilla, apoyada en el torso de Jonathan donde se sentía segura y suspiró. Él ya le había confesado sus sentimientos dos veces y ella había permanecido en silencio, insegura respecto a lo que sentía, pero llevaba un tiempo pensándolo, quizás incluso meses y temía estar enamorándose de él.

Había una pequeña posibilidad que aún se negaba a evaluar, de que ya estuviera enamorada. ¿Pero cómo no estarlo? Jonathan era un hombre con muchas cualidades y aunque sus celos eran (indudablemente) su más grande defecto, no podía hacerle competencia a todas las cosas que estaban bien en él. Para empezar (y la lista que Olivia tenía era larga), la había acogido en el campamento, en contra de los deseos de Thomas Holme y la señora Finn, con el único objetivo de garantizar su seguridad. Sin haber tenido la obligación de hacerlo, él le había salvado la vida al permitirle quedarse a su lado con los niños. Luego, otra vez, se había puesto la tarea de cuidarla y cuidar de los niños cuando habían llegado Louisville. Podría haberla abandonado y haber seguido con su viaje sin mirar atrás, después de todo, por aquel entonces ella no era nadie para él, pero Jonathan no lo había hecho. Él había abandonado a su grupo y a quienes él consideraba familia, para ayudarla y protegerlos. Aquel evento la habría derretido por completo si no se hubiera enfocado en mirarlo como familia. Durante aquellos meses él había trabajado duro por ellos, incluso aunque le hiciera miserable y finalmente, la había llevado con su familia, a pesar de que aquello representara tener que caminar sobre su propio orgullo al enfrentar a su padre. Él lo había hecho para protegerlos. Y se habían casado y él había hecho un esfuerzo por entender su complicada historia y seguir adelante con un plan y luego, había hecho un esfuerzo aún más grande por aceptar cosas que para él no eran normales y adaptarse a la forma que ella tenía de ser. Una y otra vez, Jonathan la había puesto a ella y los niños primero, cuidándolos, protegiéndolos, incluso antes de que fueran su responsabilidad y por eso, Olivia sentía que sus celos no eran un gran problema y que amarlo era incluso fácil.

Y ya no podía pensar en sangre o parentesco, ese problema había quedado atrás ya hacía un tiempo, cuando se habían casado y habían compartido la cama. Disfrutaba con él y el pensamiento de que eran familia nunca le llegaba.

Acarició su torso por sobre su traje y cerró sus ojos un momento para relajarse con las caricias que él le hacía en la espalda.

No sabía si lo amaba, pero estaba segura de que sentía cosas por él, que nunca antes había sentido por un hombre. Sentimientos fuertes y poderosos.

Vidas cruzadas: El ciclo. #1 TERMINADA +18. BORRADORWhere stories live. Discover now