Se entretuvo entre sus piernas dejando besos húmedos en sus muslos y arrancándole gemidos cuando se aferraba a su cadera y empujaba su lengua contra su sexo. Ella le cerró la mano en el cabello y se retorció cuando el orgasmo abandonó su cuerpo.

Volvió a trepar sobre ella y le aferró el rostro para besarla mientras se deshacía de su pantalón.

Ella lo ayudó con la misma ansia y cuando lo sintió empujarse en ella de una sola embestida, ahogó un gemido y le enterró las uñas en la espalda. Gimió y sus ojos se dieron vuelta sin poder evitarlo. Jonathan volvió a sus labios como siempre hacía, incapaz de combatir la adicción. Él jadeó contra su boca y sus lenguas se encontraron.

Aceleró las embestidas hasta alcanzar el orgasmo y se deslomó en la cama a su lado intentando normalizar su respiración. A veces le preocupaba lo mucho que se aceleraba cuando tenía relaciones con Olivia, era más de lo que normalmente había sentido y temía que fuera parte de la advertencia que daban todos los médicos en los libros. Luego recordaba que Olivia era una mujer del futuro que sabía más que él o todos los médicos y se calmaba.

—¿Puedo preguntarte algo, Olivia? —. Ella se giró hacia él y alzó su cabeza para apoyarla sobre su mano y asintió—. ¿Por qué aun no estás embarazada?

—¿Quieres que lo esté?

—No —respondió sin pensarlo dos veces y con honestidad en su voz—. Pero aun así me pregunto por qué no lo estas.

—También me lo he preguntado, pero supongo que es por el estrés. Es difícil que una mujer quede embarazada si está bajo mucho estrés y yo lo he estado.

—¿Por lo de viajar en el tiempo?

—Eso y la guerra que se aproxima. Despierto todas las mañanas para leer algo en el periódico que me lo recuerda y no sé si seremos capaces de impedirlo.

—No debes preocuparte por eso, a ti no te sucederá nada.

—No es por mí que me preocupo...Es por todos —. Jonathan los cubrió con las mantas y ella se dejó caer otra vez sobre su espalda—. Demasiada gente morirá en esa guerra, gente que quizás conoces o que incluso yo conozco y no puedo evitar pensar que quizás el motivo de que viajara a este año es ese.

—¿Detener la guerra?

—Exacto. Así que supongo será el estrés, no lo sé —. Cerró los ojos un momento y suspiró—. De todas formas, necesitamos un plan.

—¿Un plan para qué?

—En caso de que quede embarazada; si conservaremos el bebé o no.

—No comprendo.

—Hay ciertas plantas que tienen propiedades abortivas, es decir para suspender el embarazo —. El rostro de Jonathan no mostró ninguna expresión que fuera fácil de leer—. Si quedara embaraza podría usar eso para detenerlo.

—¿Y el bebé moriría? ¿Pero tú no? —. Se rascó la barba y lo pensó—. ¿El bebé sufriría?

—Que yo sepa no.

—Oh, bien...Es lo mejor entonces, así no tendrás que dar a luz.

Ella recordó la historia de Nolan de esa mañana.

—¿No quieres que dé a luz? —. Jonathan negó—. ¿Por qué?

—No es seguro, no hay necesidad de que te pongas en peligro innecesario y ya tenemos tres hijos ¿para qué más?

Sonrió y se acercó a su costado para acurrucarse contra su pecho.

—¿Hijos? Nunca te habías referido a ellos como nuestros hijos...no de verdad al menos.

Vidas cruzadas: El ciclo. #1 TERMINADA +18. BORRADORDonde viven las historias. Descúbrelo ahora