Sabor de amor

Capítulo 9

 Gracias a la planificación de Heechul se hicieron con un buen sitio para montar lo que en opinión de Sungmin iba a ser el campamento. Desplegaron sillas, extendieron mantas y descargaron cestas y neveras.

Kyu lanzó un guante de béisbol que fue a parar al regazo de Sungmin.

—A la derecha del campo.

—Siempre me toca a la derecha —se quejó el—. Quiero jugar en la primera base.

El hecho de que salieran juntos no le impidió mirarlo con cara de lástima.

—Lee, tienes que reconocer que juegas como las chicas. Tus lanzamientos no saldrán del campo interior. Necesito a Heechul en la primera base.

—Heechul es un doncel como yo.

—Pero no juega como si lo fuera. Hyuk cuenta con Donghae y Wook. JongWoon será el árbitro para que nadie salga herido, y además sé que lo hará bien. Ah... ahí viene mi baza ganadora.

Sungmin levantó la vista.

—¿Has reclutado a Kim Hangeng?

La mirada de Kyu acusó su espíritu competitivo.

—Es un hacha jugando, y además compensa el grupo.

—¿Lo dices por las alineaciones?

—No, lo digo por Heechul.

—¿Por Heechul? —Sungmin pasó de la sorpresa a la burla, pero se apiadó de él—. ¿Le has montado una cita a Heechul? Kyu, te va a matar.

—¿Por qué? —Con aire ausente, el joven lanzó la pelota y lo recogió con el guante—. No le estoy pidiendo que se case con él. He montado una salida de grupo.

—Te has cavado tu propia tumba.

—¿Por qué lo dices? —volvió a preguntar Kyu—. ¿Tiene Heechul algún problema con...? ¡Eh, Han!

—Hola. —Han atrapó la pelota que Kyu le había lanzado y se la devolvió—.¿Qué tal va todo? —preguntó a Sungmin.

—Ya veremos...

Han iba con unos tejanos gastados, una camiseta blanca y unas gafas de sol.

Lanzó una bola al aire y la golpeó con el bate que se había traído.

—Me ha gustado el plan: un partido y comida gratis. Mi madre ha salido con el señor Park y unas amigas —explicó llevándose el bate al hombro—. ¿Cuál es la alineación?

—Saldrás en la tercera base, como cuarto bateador.

—Me parece bien.

—Sungmin estará a la derecha del campo, como primer bateador. Juega fatal en su posición, pero su bate es bueno.

—Eso no es verdad —protestó el dándole a Kyu con el guante—. Sigue así y no te costará nada ganar la apuesta, Cho.

Sungmin se marchó airado. Han tanteó el terreno con precaución.

—¿De qué apuesta habla? 

Sungmin fue en busca de Wook.

—Quiero cambiar de equipo. Yo juego con Hyuk y tú con Kyu.

—Eres un pesado, Sungmin. Por mí, vale, pero mejor habla primero con Hyuk. 

Hyuk estaba sentado en la hierba anotando la alineación.

—Wook y yo nos hemos cambiado. Ahora estoy en tu equipo.

—Me quitan al pelirrojo y me ponen al rubio. Vale, deja que piense... Jugarás a la derecha del campo, como primer bateador.