YOU FOUND ME (gilbert blythe)

07| FORBIDDEN

➤ 07| Forbidden.

CUANDO LLEGÉ A la escuela al día siguiente, las cosas estaban un poco apagados. Los chicos estaban haciendo su rutina normal: burlarse de las chicas y jugar afuera. Las chicas, por otro lado, parecían disgustadas cuando me vieron caminar hasta el estanque y dejar mis cosas.

Diana no había caminado conmigo ese día, por lo que no estaba allí para defenderme frente a sus amigos. Supongo que llegaría tarde ya que hoy iba a caminar con Anne. Eso significaba que tenía que defenderme.

Traté de caminar en una dirección, pero me detuvieron. Traté de caminar hacia otro lado y me detuvieron de nuevo. Debía de haber diez chicas allí, porque en todos los lugares a los que iba me bloqueaban.

"Bueno, mira a quienes tenemos aquí". Josie dijo con voz snob.

Ella estaba de pie con un grupo de chicas con las que aún no estaba familiarizado. Las únicas chicas que había reconocido eran Ruby y Josie. Las otras chicas tenían que ser mayores.

"Ladrón de chicos". Ruby escupió entre dientes.

"¿De qué están hablando?" Pregunté, la confusión destellando en mi rostro.

"Ayer", dijo Josie, apretando la mandíbula. "Escuche lo que paso. Cometiste un gran error".

"¿Quieres decir con Gilbert? Eso no fue nada. Yo-" | traté de decir, pero una chica mayor me interrumpió.

"No debes saber cómo funcionan las cosas por aquí, querida." Dijo la niña, dando un paso hacia mí.

Di un paso atrás como un reflejo de cautela, pero eso no la detuvo.

"Sabes, mi querida amiga Ruby se ha sentido muy herida estos últimos días. Gilbert apenas le presta atención a ella, ni a ninguno de nosotros, cuando estás cerca". Dijo la chica.

"¡Esa no es mi culpa!" Me defendí, frunciendo el ceño.

"Oh, pero lo es." Josie interrumpió, acercándose a mí también. "Verás, no perteneces aquí".

Apreté los puños, mis uñas se clavaron en mi piel.

"Mira, no quiero problemas." Traté de decir con calma, pero eso hizo reír a las chicas.

"¡El problema empezó cuando llegaste aqui!" Ruby grito desde la parte de atrás del grupo. "Te dije que no hablaras con Gilbert, pero no pudiste resistirte"

"¿Sabes lo que le hacemos a la gente que no escucha?" Preguntó la chica, haciendo crujir sus nudillos y empujando mi mochila al suelo, haciendo que todas mis pertenencias se cayeran.

De repente me quedé sin aliento cuando la niña mayor me dio un puñetazo en el estómago. La segunda chica me dio una patada en el costado tan fuerte como pudo, provocando que me derrumbara en el suelo.

Josie luego me dio un fuerte puñetazo en la cara y se inclinó, "Sabes, nunca me gustaste".

Mi visión ahora estaba borrosa, múltiples puñetazos y patadas vinieron al mismo tiempo. Pude ver débilmente a Ruby parada en la parte de atrás. Tenía los brazos cruzados, pero su rostro se sentó lleno de preocupación, como si supiera que esto no estaba bien.

Miré desesperadamente a mi alrededor para ver si alguien podía ayudar, pero los chicos estaban dando vueltas a nuestro alrededor, riendo y animando a las chicas. Billy estaba al frente, señalando y riendo.

Finalmente, se lanzo el ultimo puñetazo, y Josie se inclino y susurró: "Tienes prohibido volver a hablar con Gilbert Blythe. Y si lo haces, hay mas de donde vino esto".

Luego se puso de pie y se alejó, dejándome inmóvil e indefenso en la hierba. Después de un minuto más o menos, Anne y Diana finalmente llegaron a la escuela. Por un momento, pensé que me verían y me ayudarían.

Pero estaba equivocado. Las dos chicas se rieron y rieron y ni siquiera miraron en mi dirección. Claro, no fue su culpa. Apenas se puede ver el río desde el frente de la escuela, así que estaba completamente fuera de la vista.

Miré hacia las ventanas para ver a Billy y sus amigos haciéndome muecas, haciendo que mis ojos se llenaran de lágrimas.

Me tomó mucha fuerza sentarse, pero lo logré. Agarré mis cosas y las puse en mi bolso antes de balancearlo sobre mi hombro. Ahora era la parte difícil levantarse.

No sabía cómo lo iba a hacer. Entonces, como si dios me hubiera visto luchar, escuché un susurro de hojas que venían de la entrada. Era Gilbert, debía de llegar tarde.

"Gilbert," me atragante, haciendo que sus ojos se dispararan hacia mi. "ayúdame".

"¡Samantha!" Gilbert gritó, corriendo hacia mí y arrodillándose. "¿Qué pasó?"

"¡Por favor, date prisa! ¡No pueden vernos!" Grité, señalando la ventana.

"¿Quién?" Preguntó Gilbert, examinando mis cortes y moretones.

"¡Alguien!" Dije rápidamente. "Por favor, llévame a cualquier parte menos aquí y te lo explicaré, pero si quieres ayudarme tendrás que cargarme. No puedo caminar-"

"Hecho." Gilbert dijo, interrumpiéndome y recogiéndome al estilo nupcial.

Después de alejarme de la propiedad de la escuela, dejé escapar un suspiro que no sabía que estaba conteniendo.

"Gracias," dije, mirando sus familiares ojos color avellana que me hacen sentir como si estuviera mirando las estrellas todo el tiempo.

"En cualquier momento", dijo y sonrió levemente. "¿A dónde voy exactamente?"

"Bueno, no lo se. La Sra. Barry tendrá un infarto si me viera así, y Diana ni Anne pueden saberlo tampoco". Le dije a él.

Gilbert asintió, sabiendo que era mejor no hacer más preguntas.

"Podemos ir al cobertizo. Nadie puede vernos allí. Trabajo allí todos los días y es bastante solitario". Él admitió.

"¿No tienes hermanos o hermanas? ¿O son solo tú y tus padres?" Cuestioné.

"Solo somos mi padre y yo ..." Se interrumpió, mirando al frente.

"Oh siento escuchar eso." Dije, dándome una bofetada mental por hacer esa pregunta.

Estuvimos en silencio por un rato hasta que finalmente llegamos al cobertizo de Gilbert justo enfrente de su casa. Me dejó con cuidado en el suelo y se puso de pie.

"Vuelvo enseguida", dijo, sonriendo y corriendo hacia su casa para tomar un medicamento y una manta.

Cuando estaba solo, pensé para mí mismo:

"¿Cómo voy a explicar lo que le pasó a Gilbert? Se supone que ni siquiera debo hablar con él. ¿Y si las chicas se enteran? Eso no puede suceder. No creo que pueda soportar que me golpeen así de nuevo. ¿Qué se supone que debo decir?"