Capítulo X

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Es curioso donde a veces te lleva la vida, es impredecible, espontánea, como tirar una moneda al cielo para ver si es cara o cruz. El resultado te puede gustar más o menos, pero no se puede cambiar. Y te preguntaras.

¿A que viene está chapa que me acabas de contar mijo?

Pues verás, a mí me acababa de tocar el peor lado posible de la moneda en esos momentos, para ser específicos habían cambiado al imbécil de Nathan de sitio por no prestar atención. ¿Adivinas dónde? Bingo, a mi lado.

-Nah, diversión asegurada con Jacqueline. -Dijo irónico, mientras miraba hacia su grupito de secuaces, que sonreían morbosos.

Deseadme suerte para que no le reviente el tabique nasal familia.

-Silencio señorito Walsh. -Le advirtió la profesora.

-Perdón, perdón, es la emoción, me encanta mi nuevo sitio. -Sonrió ladeando los ojos. Abrió el libro y se pasó bastante rato ojeándolo, ignorando por completo lo que la maestra explicaba. De vez en cuando miraba atrás y sacaba su risa de idiota. -Amigo. -Odié el tono con el que se dirigía a mi. -¿Me prestas un bolígrafo? -Su mano se dirigió a mi estuche sin que yo le dirigiera la palabra.

-No soy tu amigo, y no me sobran bolígrafos. -Agarré mi estuche. -Sus ojos me amenazaron, pero no me importó, yo no le tenía miedo a un gilipollas como él.

-Relaja esas malas pulgas Pitufina. -Genial, hasta insultando es nefasto.

-Y yo que pensaba que meterte con los demás era tu fuerte... -Volví a mirar hacia la pizarra y el me robó el estuche de la mano. Lo abrió y cogió un bolígrafo azul.

-Devuélveme... -Repentinamente me tiró el estuche en la frente, lo que provocó que cayera, esparciendo todos mis bolígrafos por el suelo de la clase.

-¡Ya está bien! Nathan, a dirección. -Gritó la profesora, que seguro había visto toda la escena.

-Pero... ¡¿y él que?! -Me señaló mientras me mataba con la mirada.

-¿Te crees que soy tonta?, sacas de quicio a todo el que se sienta a tu lado, siempre pasa lo mismo, ¿¡no te cansas de la misma historia!? -Nathan recogió sus cosas y abandonó la clase, camino a dirección, no sin antes mirarme con cara de asesino y dedicarme un "Que te den por culo" verbal.

El descanso para comer llegó y decidí ir por algo de picar a la cafetería. Por el camino me encontré a Robyn y decidí saludarla. -Hey. -La sorprendí por las espaldas.

-Hola Ulises ¿qué tal? -Se giró y me abrazó, lo cual me pilló por sorpresa. -¿Llevas bien los exámenes?

–Supongo que sí.–Respondí a su sonrisa con otra.

–Yo me ando muriendo, pero eh, me dolió, pero me duele más un México corrupto. –Me reí de su broma. Un clásico de los memes, sí señor.

Seguimos avanzando por los pasillos y yo hundí mi cabeza en el móvil. Tenía algunas notificaciones de aplicaciones variadas.

–Joder, no se cansan de molestar a la gente. –Elevé mi mirada y la dirigí donde estaba la de Robyn. Había un grupo de chicos con sudaderas verdes del equipo de baloncesto de mi Instituto. Con que la probabilidad de que fueran 95% músculo y 5% cerebro era más que probable.

Estaban en formando una cerrada "U" frente una fila de taquillas, taquillas que se me hacían familiares. Había uno de ellos que estaba pegado a una de las taquillas. Joder era una acorralada, y joder, era Asher al que estaban acorralado.

Apreté los nudillos y quise quedarme ajeno al tema, pero mis piernas se movían solas, era casi como magnético. No era capaz de ver cómo lo molestaban y él no hacia nada al respecto. Robyn me seguía a mis espaldas, bastante sorprendida por mi inesperada reacción.

IN THE HEAVEN |BL|Where stories live. Discover now