Capitulo 11

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Al día siguiente intenté hablar con ella y no respondió, en su casa me informaron que estaba en Mac Donald de Godoy Cruz con sus amigos.

Seguí insistiendo, no respondió los audios de WhatsApp y había leído los mensajes, eso me molestaba, si estaba enojada por la discusión de la noche anterior, porque mierda no hablaba conmigo, empeoraba todo ignorándome.

Fui a su encuentro, un lugar muy concurrido por adolescentes, que yo hace años que no visitaba, la vi en una de las mesas charlando animadamente. Pensé que lo mejor era esperar a que saliera, para que evitar más conflictos.

Dos horas más tarde, la vi salir acompañada de un chico se quedaron charlando en la vereda, supongo que era uno de sus amigos, sin dudas se estaban divirtiendo porque escuchaba su risa desde donde yo estaba.

Esperé...

Hasta que no aguanté mas.

Le di arranque al auto, me detuve junto a ellos y la llame: ―Mariela, subí― 

Miró sorprendida, le dijo algo al chico que la acompañaba y con un beso se despidió de él, luego subió al auto.

― ¿Es en serio esto? ¿Es así como tenés pensado hacer las cosas Diego?―

― ¿Porqué no me atendés el teléfono? ―

― ¡Por qué no tengo ganas! ―

―No estoy jugando Mariela, no me tomes por pelotudo. ¿ Ese quién es? ―

― ¿Nacho? Es mi amigo.―

― ¿Qué tanto tenés que hablar con él? ― sugerí levantado las cejas,

¿No escuchaste que es mi amigo?—

—Tiene unas ganas de llevarte a la cama tu "amigo"— Ironicé.

—Yo no hago eso con mis amigos. ¿Vos podes decir lo mismo?― prácticamente escupió esa pregunta.

―Odio que me mientan, ojo con lo que estás haciendo―

―Pero vos si podes mentir, ¿cierto? ¿Cuál es el problema si yo hago lo mismo?―

La tome del pelo y le hable irritado justo encima de su boca.

―Te estas comportando como una zorrita, quiero que te quede claro que si te veo o me entero que me estás siendo infiel, te mato Mariela―

―Soltame ahora―gritó, tratando de evitar mi boca, la acerqué más y la bese, primero puso resistencia llevando sus manos a mi pecho para alejarme, después se tranquilizó y yo también―

Lo siento, mi amor, no quiero hacerte esto, los celos me están volviendo loco―

―¿Celos de quién? soy incapaz de estar con otro porque te amo, con el alma. No podes pensar que cada vez que estoy con alguien te voy a engañar―.

―¡No quiero que hagas ese puto viaje! Eso me tiene mal, no voy a cambiar de opinión con respecto a ese tema―

—Yo tampoco mi amor, no es una decisión tuya—

―¿Vos decís que me amas y no podes dejar algo que pone en peligro los nuestro?―

―El que está poniendo esta relación en peligro sos vos, yo no tengo nada que ocultar ―

Ninguno de los dos íbamos a cambiar de opinión, así que decidí dejarla en su casa, iba a terminar esta discusión.

¿Porque mierda tiene que ir? Yo perdí la cuenta de las chicas con las que tuve sexo cuando fui de viaje de egresados, no ha cambiado nada a pesar de los años.

Vulnerable.    (Diegodelig)Where stories live. Discover now