11

1.4K 143 41
                                    

Capítulo once.

"Mierda"

Pov. Uraraka Ochako.

Cuando abrí los ojos, estaba en mi habitación. Aún no entiendo cómo llegué aquí pero puedo asegurar que dormí de la mejor manera en mi cama.

¿Dormí en mi cama verdad?

Ya no sé ni qué pensar.
Con pereza me levanté de mi cama y me introduje a la ducha.

Para cuando había terminado de bañarme, mi cuerpo había dejado de escucharme.

Olvidé por completo tomarme la medicina.

Contemplé como mi cuerpo se movía por si solo mientras se colocaba el uniforme lentamente. La puerta fue tocada un par de veces pero al parecer mi "otra yo" no estaba interesada en quién quiera que fuese.

Un tanto curiosa, finalmente escuché como tsuyu Chan avisaba que iba a pasar mientras abría la puerta.

Sentí cómo mi yo, sonreía fingida mente.

— ¿Sabes dónde está katsuki?

Tsuyu- Chan pareció sorprendida ante lo que "yo" había mencionado, pero negó con la cabeza un par de veces.

— Ya veo que molestia, puedes irte.

Con pena observé cómo se marchaba y quedaba yo solo en mi habitación.

Después de unos minutos escuché unos apresurados pasos viniendo hacia aquí. Curiosa de quién puede ser a esta hora, obligué de alguna y otra manera a mi cuerpo voltear la cabeza.

— Kastuki.— susurré al igual que mi otro yo.

Bakugou cerró la puerta tras de sí y camino hacia mí.

—¿Quieres retomar a como lo dejamos la última vez?— propuse mientras recorría con la llema de mis dedos, uno de los brazos de bakugou.

Tragó saliva. — tan loca como siempre.—murmuró.

Lo jalee del brazo, obligándolo a tumbarse en mi cama y subí a horcadas por encima de él.

¡Esto es sumamente Vergonzoso!

Observé fijamente sus ojos mientras el tensaba su mandíbula. Con una divertida sonrisa empecé a acariciar su amplio y fornido pecho.

— Como jodes.— habló ronco.

Un escalofrío recorrió mi espalda y sin esperar más, lo besé.

Al principio pareció negarse pero después de unos segundos empezó a ceder lentamente. Sus manos pasaron a posarse en mi cintura, obligandome a pegarme aún más a su cuerpo.

Sonreí en medio del beso mientras mordía ligeramente sus labios e introducia mi lengua en su boca.
Pareció sorprendido pero me correspondió ágilmente.

No sé ni cómo se hacer esto, pero mi cuerpo lo hace y se siente demasiado bien.

Con una de mis manos pasé a acariciar sus mejillas y eso pareció no disgustarle.

Sin dejarme reaccionar se sentó mientras aún me sostenía con sus amplias manos y se ponía de pie.

¿Que estaba haciendo?

Y sin previo aviso me acomodó como un saco de papas y empezaba a caminar en dirección hacia la puerta.

No me percaté de que mi cuerpo había estado la mayoría del tiempo a mi disposición. Gracias a que empecé a patalear.

¿¡Soy un pervertidaaa!?

Ruborizada me cargó hasta la enfermería.

— Será mejor que la vieja esa se encargue de tu asunto, acosadora. Asique no jodas y ve y tomate la puta medicina de una puta vez.— expresó mientras se cruzaba de brazos.

✔️💥 l Aᴄᴄɪᴅᴇɴᴛs ᴅᴏɴ'ᴛ ᴇxɪsᴛ l  💥[KACCHAKO]✔️Where stories live. Discover now