Capítulo 2: La noticia

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En todo el camino a casa, quería preguntarle a Jack sobre más detalles de anoche, pero cada vez que abría la boca, el le subía el volumen a la música solo para molestar.

Al llegar a casa, me bajé del auto aún malhumorada, pero me sorprendí cuando Jack se bajó también para acompañarme hasta la puerta de mi casa. Apenas pisamos el escalón de la entrada, el se giró para ver por detrás de nosotros y frunció el ceño.

—¿Qué hace el auto de mi madre aquí?.— preguntó más para el que para mi.

Iba a responder, pero mi padre sale hecha una furia para interrumpirme.

—¡Elsa Arendelle! ¿Qué son estas horas de llegar a casa?.— exclamó señalándome con el dedo.

Papá, yo no quise...yo...me quedé dormida...

Atrás, salió una mujer de mi casa y se puso a lado de mi padre para tomarlo del brazo cariñosamente. Debe ser la pareja de mi padre, voy a tener que acostumbrarme a verlo con una mujer diferente.

—Buenos días.— dijo la mujer un poco nerviosa, apretando el brazo de mi padre para no sentirse insegura.

Jack abrió la boca sorprendido y puso una cara de horror.

—¿Mamá...?

¿Mamá?

¿Le dijo mamá?

Jack, esto es lo que llevaba tiempo intentando decirte.— dijo la mujer recuperando su voz.— Él es mi pareja, George Arendelle, el padre de Elsa.

Mi corazón paró.

Y esa no fue la cereza del pastel, claro que no, había más.

—Y vamos a vivir todos juntos.— dijo la mujer con una sonrisa en el rostro.

Nuestros padres sonreían, mientras que a Jack y a mi, en cualquier momento se nos caería la baba al tener tanto tiempo la boca abierta. Quiero agarrar la primera pala que encuentre, cavar el hoyo más grande en la tierra, meterme y no salir nunca más de ahí.

—Kira y yo hemos decidido mudarnos todos juntos la próxima semana.— dijo mi padre sonriendo, como si hubiese ganado el premio Nobel al padre más ignorante.

—Y si no llegábamos hoy, ¿cuándo tenían planeado decírnoslo? ¿El día de la boda?.— pregunta Jack nada feliz.

—Jack, por favor, nunca encontramos el momento para decírselos.— dijo la supuesta Kira.

—Increíble.— bufé mirando hacia el cielo.

—Esperen, tengo entendido que no se caen muy bien, ¿cómo es que llegaron juntos?.— preguntó mi padre, levantando una ceja.

Jack evadió la pregunta de mi padre y entró a nuestra casa como si fuese la suya. Lo sigo y nos sentamos en el comedor. Jack ni siquiera se tomó la molestia de servirse en un plato, agarró un panqueque del montón y se lo metió a la boca como un taco.

Yo lo miré asqueada y me senté a su lado, sirviéndome el desayuno como una persona normal haría.

Mi padre cierra la puerta de la entrada y se sienta en la mesa donde estaba junto a Kira, Jack queda a lado de mi.

Tentación | JelsaWhere stories live. Discover now