Niña Bonita (TERMINADA)

ilusa, mil veces ilusa.

Poché;

Cuando llegamos al hotel, le iba a proponer a Calle que fuéramos a la playa a nadar un rato, pero fui interrumpida por Mario y Daniela se fue, porque me dijo que debía ir a una reunión.

-Poché! Cómo estás?- tocó mi hombro

-Hola Mario, todo bien- sonreí pero luego me di cuenta de que el no venía en el bus- Por qué no fuiste a la excursión?- pregunté

-Oh, bueno. Estuve un poco ocupado porque tenía una llamada importante- sonrió -Poch, hablando de cosas importantes... Necesito que me asesores con algo.

Asentí.

-Acompáñame- dijo y me guío hacia un taxi con el

Mientras el conductor nos llevaba a un lugar que desconocía, Mario me iba hablando en el camino.

-Hay una chica que me gusta, y quiero comprarle un regalo. Pero aún no sé que darle, porque no la conozco muy bien

-Upaaa- dije y le di un pequeño golpecito en su hombro -se puede saber, quién es la afortunada?- moví mis cejas con una sonrisa en mi rostro

-Creo que la conoces, está en Misi- hizo una expresión pensativa -pero, no te puedo decir quién es todavía

-Ni que fuera un secreto del gobierno, igual me vas a tener que decir algún día, tonto

-Si, o tal vez no- soltó una carcajada

Y luego de algunos minutos, llegamos a un centro comercial.

Nos bajamos del taxi y caminamos hacia la entrada del lugar.

-¿Qué te gustaría comprarle?- pregunté

-No lo sé, algo que pueda recordar siempre. Tú eres chica, deberías saberlo

-Qué te parece una pulsera? Pero ya sabes, que tenga un significado- le dije y señalé una tienda de joyas

El asintió, y caminamos hacia allá.

Mario era un chico... Bastante indeciso, tardamos una hora viendo que podría gustarle a la chica.

-¿Y como es ella? Dame pistas, quizás así se me ocurre una idea de lo que puede gustarle- dije mientras observada una de las vitrinas de la tienda.

-Amm, es un poco Rockstar. Ya sabes, con un estilo bastante cool, se nota que no le gusta tanto lo material, sino el significado de las cosas. Y, cuando la ví a los ojos, simplemente olvidé todo lo malo que me pasaba Poché, ella... Es increíble.

wow.

Mario estaba ilusionado, y realmente me alegraba por el.
Solo esperaba que esa chica lo valorara, el merecía ser feliz.

-Tengo una idea!- dije emocionada.

Y así pasamos parte de la tarde Mario y yo, entrando y saliendo de tiendas en aquel centro comercial de Cartagena.

Estaba comiendome un helado y...

-¡POCHÉ!- Mario miró su teléfono -debemos irnos, se va a hacer tarde- se levantó de su silla y me hizo una seña para que imitara su acción.

-Pero, por qué? Apenas son las 5, y no tengo nada que hacer.

-Pochosaurus, deja de preguntar tanto y sígueme- me tomó suavemente del brazo y nuevamente, nos montamos en un taxi.

Pero al llegar al hotel, Mario me dijo que aún habían un par de cosas por hacer, y me llevó hacia el ascensor, pude observar que pisó el botón que llevaba hacia la parte superior del hotel, algo así como una terraza que daba vista hacia el mar.

-Poché- Mario me miró

-Dime- respondí

-Cuando lleguemos allá arriba, por favor, no tengas miedo a nada. La vida es una sola, y debes disfrutar cada instante y a cada persona que se cruza en tu camino- sonrió

No entendía absolutamente nada.

Solo asentí y pensé en lo que me dijo, hasta que el ascensor se detuvo en el piso correspondiente.

Salimos de allí, y lo primero que ví fue un camino de flores en el suelo.

Que llevaba hacia una persona, que conocía perfectamente.

Daniela Calle.

La miré y solo sonreí, estaba jodidamente hermosa.

Tenía algo en sus manos, que no pude ver bien, ya que empezó a caminar hacia mí.

¿Acaso ese momento que soñaba todas las noches había llegado? O yo solo estaba confundida creando una expectativa falsa?

Yo era una ilusa
Ilusa, mil veces ilusa.- pensé

-Hola- sonrió mientras se acercaba a mí.

-Hola- respondí nerviosa -¿Qué es todo esto?

-Esto... Es el inicio, de lo que quiero para nuestras vidas, María José- acarició mi mejilla.

:0 Upa, upa. Esto se pone bueno.