Yeongyu's Shipper [Yeongyu] Completa

Hey Stupid, I Love You! [Extra Sookai]

—Lo sé— Soobin suspiró profundamente —Vimos a Jisung con Chenle.

—Sí, bueno— hizo una mueca —Fué sorpresivo— rió sin gracia.

El mayor solo miró delicadamente al menor y se acercó hasta estar a su altura. Pasando un brazo por la cintura contraria y otro debajo de sus muslos, alzándolo como princesa.

—¡Soobin!— gritó asombrado —¿Qué mierda haces?.

—Pescaremos un resfriado si seguimos bajo la lluvia— recordó —Mi casa no está muy lejos. Así que debemos darnos prisa.

—P-pero ¿Y Yewon noona?— inquirió confundido.

El pelimorado se detuvo por unos segundos y le dedicó una mirada suave con una media sonrisa.

—Ella está bien.

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Después de tomar una ducha y secarse debidamente el cabello, HueningKai estaba sentado sobre la cama del mayor, impregnándose inevitablemente con el perfume del pelimorado que inundaba la recámara.

—Toma— Soobin entró a la habitación, con dos botes de helado y le ofreció uno al menor —Siempre es un buen momento para comer algo de helado y recuerdo que tú favorito es el de menta con chocolate.

—Gracias— Kai aceptó tímidamente, observando como las gotas de la cabellera pelimorada de Soobin caían con gracia sobre la camisa blanca que usaba el mayor.

De repente se encontró observando demás y se sonrojó con fuerza, volteando su rostro.

Soobin tomó asiento al lado del menor, recargando su espalda en la cabecera de la cama, el silencio era cómodo, muy distinto al que habían mantenido en el parque.

—Jisung me usó— HueningKai comentó amargamente, ganándose la atención del mayor —Creo que fuí muy estúpido.

—Claro que no, el estúpido fué él, por no saber apreciar a la persona más linda que puede existir en éste mundo.

—Creía que para ti la persona más linda era Yewon noona— comentó con un poco de recelo.

Soobin no pudo evitar reír.

—Tal vez.

HueningKai sintió su corazón oprimirse un poco por ésa respuesta.

—Supongo que....— por error, alzó demás su bote de helado, generando que sus mechones castaños y frente se ensuciarán de menta con chocolate —Oh, mierda— tocó avergonzadamente su cabellera.

—No, no, lo estropearás más— Soobin detuvo al menor y rápidamente colocó su propio helado sobre el buró a un lado de su cama, para después tomar unos pañuelos desechables que se encontraban en su cajón y delicadamente colocar uno sobre la frente del castaño —Cierra tus ojos Ning— pidió amablemente.

De inmediato el mencionado acató, poniéndose aún más rojo por su torpeza.

—Ésto es vergonzoso.

—No le diré a nadie si quieres, se quedará entre nosotros— Soobin rió un poco, terminando de limpiar cualquier rastro de helado —A-aún queda un poco sobre tu frente— balbuceó —No abras tus ojos, pondré el pañuelo en el bote de basura y tomaré uno nuevo.

HueningKai asintió, sintiendo como el peso sobre la cama se hacía más ligero, significado de que Soobin se había levantado, así que esperó. Pero pasados unos treinta segundos, el menor no sentía ningún otro pañuelo sobre su frente, no creía que sería tan tardado tomar otro.

Confundido, entreabrió su boca para preguntar sobre el paradero del mayor, pero rápidamente sintió como su labio inferior era capturado ligeramente por otros labios, obligándolo a abrir por completo su boca.

Soobin lo estaba besando.

Torpemente y con el temor de abrir sus ojos y descubrir que era un sueño, HueningKai correspondió el beso.

Su primer beso.

Soobin se sorprendió y emocionó, por su mente pasó que Kai se separaría y lo regañaría por su atrevimiento. Decidió tomar riesgos y besarlo desprevenido.

Vaya que valió la pena.

Después de unos segundos, la falta de aire se hizo presente y Soobin se separó. Notando tiernamente que HueningKai aún mantenía sus ojos cerrados.

—Ésto también se puede quedar entre nosotros si quieres— comentó, pero rápidamente recibió la negativa del castaño, quién lentamente abría sus ojos.

Miel contra avellana se encontraron.

Kai tomó al mayor por su camisa y volvió a unir sus labios, con anhelo y casi desesperación. Tanto tiempo le había tomado a su corazón entenderlo. La persona que amaba siempre había sido Soobin, solo Choi Soobin.

—No me había dado cuenta que tenía a la persona ideal para mí justo a mi lado— murmuró nostálgico —Siempre fuiste tú Soobinie.

—¿Qué estás....

—¡Que te amo!— habló eufórico —¡Mierda te amo! Solo que no lo había notado.

—¿M-me amas?— balbuceó sorprendido, recibiendo de inmediato el asentimiento frenético del castaño.

—Por supuesto que sí— HueningKai hizo una mueca —Solo que.......creo que me dí cuenta demasiado tarde.

—¿Por qué.....

—Tú amas a Yewon noona— musitó bajito —¿No es así?.

Soobin tuvo que hacer uso de todo su autocontrol para no reírse a carcajadas y hacer enojar al shipper. HueningKai le cortaría sus pelotas.

—Kai, mi lindo Kai— acarició las pequeñas orejas del castaño —Yewon no me gusta.

—¿Qué?— abrió sus ojos como platos —P-pero tú y ella....

—Es solo mi amiga, además, ella tiene novio— confesó, ahora sí no pudiendo evitar echarse a reír por la incredulidad dibujada en el lindo rostro del menor.

—¡Idiota!— Kai puchereó y golpeó el hombro del pelimorado —¡No tienes idea de cómo me sentí! ¡Me hiciste sufrir!— reclamó.

—Bueno— Soobin detuvo los golpes del castaño y levantó sus hombros —No creo que se compare a lo que yo sentí cuando aceptaste la cita de Jisung hace un mes.

—¿Eh?.

—¿Recuerdas que yo te iba a decir algo ése día?.

Kai asintió.

—Iba a confesar mis sentimientos Ningning— admitió —Tu siempre me has gustado y pensé en hacerlo en ése momento. Solo que llegó Jisung y pues......el resto ya lo sabes.

—Joder— el castaño chasqueó su lengua —Fuí un hijo de puta.

—Sí— Soobin secundó —La verdad sí.

—Lo siento— susurró avergonzado.

—Pero éso ya no importa— el pelimorado levantó sus hombros, abrazando efusivamente al menor —Porque ahora sé que me correspondes, dios, me haces el hombre más felíz del jodido mundo HueningKai.

—¿De verdad me amas?— volvió a cuestionar con duda.

Soobin sabía que el castaño tendría sus dudas, después de todo, las escenas que dió junto a Yewon noona dejaban mucho que desear. Pero él le recordaría cada día que lo hacía, aunque le llevará su vida entera.

Así que rápidamente volvió a capturar los labios de HueningKai, ésta vez profundizando más el beso y exclamó:

—¡Hey tonto, te amo!.

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Espero les haya gustado éste pequeño especial>3, solo falta el del Yeongyu. ¡Gracias por leer!💚.