Yeongyu's Shipper [Yeongyu] Completa

Hey Stupid, I Love You! [Extra Sookai]

—Kai...

—Vete al diablo Jisung— finalizó, dando grandes sancadas en dirección distinta al pelirosa.

Sí, éste día también no puede ir peor.

A lo lejos, pudo distinguir como Soobin envolvía la cintura de Yewon entre sus brazos y le daba un beso en su frente, sosteniendo un conejo de felpa gigante.

Una lágrima traicionera resbaló por su mejilla, no era un buen momento para correr hacia Soobin y querer que lo proteja de todos como solían hacer de niños.

Ahora su mejor amigo tenía otras prioridades que lo sobrepasaban a él.

Así que sintiéndose más que miserable, salió del parque, sentándose sobre la acera de la calle. Sin importarle si sus ropas se estropeaban por el polvo, éso era lo que menos le importaba en éstos momentos.

Y lloró, HueningKai no lo soportó más y lloró como si fuera un bebé al que le quitan su juguete favorito. No sabía exactamente porqué, tenía muy claro que era demasiado pronto para enamorarse de Jisung, no había logrado desarrollar ése bonito sentimiento en ninguna de las mil citas que tuvieron.

Pero no dejaba de ser doloroso, ya que fué la primer persona en la que se interesó más allá de una amistad.

Una gota cayó sobre su cabeza, seguida de otra y otra, bien, había comenzado a llover, por lo menos la lluvia cubriría sus mejillas empapadas de lágrimas.
Su aspecto ya no sería tan deplorable.

Soobin.

Otro tema que tenía a su cabeza en un hilo ¿Qué sentía por su mejor amigo? Cariño obviamente, pero ¿Era normal querer arrancarle cada extensión a Yewon cuándo abrazaba al pelimorado?.

¿Era normal ésa sensación de tristeza y furia que sentía en su interior, cada vez que notaba la bonita sonrisa de Soobin dirigida hacia la castaña?.

¿Eran simples celos de mejor amigo?.

Su corazón estaba confundido ¿Por quién lloraba? ¿Por Soobin o por Jisung?.

Inevitablemente a su mente arribaron diversos flashbacks de situaciones que solía pasar junto a su mejor amigo.

Recordó cuando se cayó estrepitosamente en aquel centro comercial y segundos después Soobin hizo lo mismo, solo para que no se sintiera avergonzado por su propia caída frente a todos.

Recordó cuando el pelimorado le preparó galletas, recordó todas las veces en que Soobin lo ayudaba a estudiar arduamente y lo animaba. Soobin siempre recordaba todo lo que le decía, sus gustos y lo que le atemorizaba. Cómo él siempre se la pasaba hablando sin parar y el pelimorado únicamente se mantenía a su lado, escuchándolo atentamente.

Soobin.....siempre fué Soobin. Solo que no se había dado cuenta hasta ahora.

—¡Kai!— un grito agudo lo sacó de sus pensamientos, alzó su mirada y se encontró con su mejor amigo, quién lucía agitado y más empapado que él mismo.

Soobin se detuvo justo a un lado del castaño, descansando sus manos sobre sus rodillas, en un intento de recuperar el aire perdido por correr grandes distancias.

—¡Mierda Ningning! ¡Te busqué por todo el jodido parque! ¡Eres un tonto!¡No sabes el terror que sentí cuando Jisung dijo que te habías ido!— regañó —¿¡Acaso quieres matarme del susto!?.

HueningKai palideció, sorprendido por ésa información.

—Y-yo, lo siento— tartamudeó —Es solo que....— bajó su mirada, incapaz de terminar su oración.