𝖥𝗋𝖾𝗌𝖺𝗌 𝖾𝗑𝗉𝗅𝗈𝗌𝗂𝗏𝖺𝗌 / [𝗕𝗮𝗸𝘂𝘁𝗼𝗱𝗼]

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Capítulo IX.

Desde el incomodo encuentro de Fuyumi y Tenko el ambiente era relativamente tenso para Toya, este tenía que cumplir, forzosamente claro, a tanto las peticiones de su hermana como a las de su novio. Y Shoto, él la estaba pasando de maravilla viendo con tranquilidad los productos de la tienda sin tener que estar cuidando a las mini copias de su esposo y de él mismo.

—Doki — susurraron detrás de su nuca, del susto dejó caer el producto de limpieza facial.

—¡Toshi! ¡No hagas eso, carajo! — exclamó sorprendido y asustado recogiendo el producto, su mano derecha tocaba el lado izquierdo de su pecho verificando los palpitados de su corazón.

—¿Te asuste? Lo siento, Doki, pero me alegré en encontrarte antes de nuestra salida en la noche.

—A mí también me alegra verte, solo que vine con mis hermanos, pero...—  señaló con la mirada delante de ellos, Toya estaba sentado en medio de los vestidores de "damas" y "caballeros", de ambos cada cinco minutos salían Tenko y Fuyumi pidiendo al mismo tiempo la opinión del albino.

—Wow, eso está algo tenso — opino Hitoshi sintiendo algo de pena por el chico.

—Algo así, mientras no me llamen...

Demasiado tarde.

—¡Shoto! — grito Toya casi desesperado al no dejar de oír la discusión que había comenzado con él en medio. El menor, con temor de ir, fue acompañado de su amigo.

—¿Qué carajos les pasa? — miro molesto a Fuyumi y a Tenko esperando una explicación de su discusión.

—Tu hermana empezó a insultarme, como si no supiera las cosas que Toya ha hecho también.

—Que él intente engañarte es tu culpa — opinó la de lentes cruzando los brazos.

—¿Mi culpa? Tu maldito hermano me ha intentado engañarme con miles de pretextos.

—¿Entonces por qué no lo dejas? Todo es tan fácil como eso, Tenko.

El pelinegro apretó los puños molesto.

—Porque incluso si trato de romper con él, ese estúpido sentimiento de tristeza y las ganas de buscarlo no desaparecen, porque él puede romperme el corazón las veces que quiera, aunque suene estúpido, lo amo intensamente. Pero es algo que tú no entenderías, nunca has amado a alguien más aparte de tu familia, permiso.

—Tenko, espera — Toya fue detrás de su novio tratando de alcanzarlo, pero el guardaespaldas de este lo detuvo.

—Señor Todoroki, sabe como se pone, mañana vaya a la mansión y seguro lo recibirá. Permiso.

Fuyumi ni se inmuto, siguió en la misma pose solo que mirando hacia el suelo. 

"Nunca has amado a alguien más aparte de tu familia" aunque eso fuera verdad le dolió, sus hermanos han experimentado aquel sentimiento ajeno al amor familiar. La verdad a veces duele.