𝖥𝗋𝖾𝗌𝖺𝗌 𝖾𝗑𝗉𝗅𝗈𝗌𝗂𝗏𝖺𝗌 / [𝗕𝗮𝗸𝘂𝘁𝗼𝗱𝗼]

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Capítulo II.

Aquella noche no durmió, se la paso pensando que plan llevaría a cabo para dar el primer paso con su familia, incluso su mejor amigo, Kirishima Eijiro, se quedó despierto con él. Habían hecho una videollamada por la madrugada, incluso cuando la alarma del novio de su amigo sonó no dejaron de hablar, hasta Kirishima ignoro el regaño de Izuku por no decirle que iba tarde a desayunar con su madre y padrastro. "¿Quién putas desayuna a las seis de la mañana?" se preguntó mentalmente Bakugo después de haber finalizado la llamada.

Aún no estaba bastante convencido del plan llamado "Recuperación de familia fresitas explosivas" daba créditos al idiota de su amigo por el nombre, incluso había hecho un folleto de tres pliegues. Con cada paso escrito y dibujado de lo que tenía que hacer en aquellos cinco días de campamento. ¡Incluso el idiota había dibujado a su Shoto e hijos como fresas y pequeñas bombas, hasta él, Katsuki, era una bomba!

Shoto, Rei e Hiro estaban representados en forma de fresas, cada uno de un tamaño diferente, quedando claro que Shoto era la fresa más grande dibujada. Él junto con Yuki y Daiki eran representados por bombas, él representado como la bomba más grande.

Kirishima antes de colgar dijo que le llevaría el folleto hasta su casa antes de que se fueran, era ridículo también era obvio que no lo llevaría, o tal vez sí, podría darse ligeras ideas, por si acaso también lo escanearía para tenerlo en su teléfono, sólo como una medida de emergencia.

Termino de empacar la última prenda en la pequeña maleta, no podía esperar la hora de ver la cara que pondría el hermano mayor de los hermanos Todoroki. Ninguno de los demás hermanos de Shoto al igual que el padre de esté, sabía del proceso de su divorcio. Toya se enteró por andar de metiche en una conversación que no era de su incumbencia.

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[ Flashback ]

El albino llevaba a sus sobrinos de regreso a la casa de éstos, le había pedido a Shoto permiso para llevarlos al zoológico recién inaugurado, esté no se opuso siquiera, tenía que admitir que había veces que su pequeño hermano sobreprotegía a sus hijos. Incluso iba a invitarlo a él también, pero al notar las ligeras bolsas debajo de sus ojos cambió de opinión, se sentía culpable por no asumir como hijo mayor el cargo de nuevo jefe de la empresa. Pero eso no era algo que le apasionara, no se veía en aquella enorme oficina con el estrés al tope y consumiendo cafeína a lo desgraciado, arrugó inconscientemente su respingada nariz con solo pensar aquello.

Pero también admitía que su hermano menor estaba llevando por buenas manos la empresa, tanto Fuyumi como Natsu y él no hubieran podido con tal carga apenas el primer mes.

Al llegar a la entrada tocó el timbre esperando paciente a que Shoto abriera, nada. Volvió a timbrar, pero de nuevo ni una señal de vida, "tal vez sigue dormido, tiene el sueño pesado" pensó, acomodo al niño dormido entre sus brazos. Verificó que los cuatro estuvieran, Yuki y Rei estaban por quedarse dormidos recargados en la puerta, Hiro estaba en sus brazos y el pequeño Daiki estaba en su carriola igual dormido.