capítulo uno

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EL QUE PROMETÍA CON SER el primer verano divertido desde que Maia había entrado a Hogwarts se fue al traste por momentos. Hasta que finalmente, la chica acabó odiándolo. ¿Por qué? Recapitulemos.

Volvamos atrás al primer verano después de entrar en el colegio de magia escocés. Había hecho planes con sus amigos para pasar algunos días en sus casas y ella también los había invitado a la suya, por supuesto. Sin embargo todo se torció cuando, una semana después de regresar, un muggle atacó a su tía Dorcas mientras estaba en una misión y esta acabó ingresada en San Mungo, el hospital de los magos, con heridas muy graves. Ella, su tío Remus y su prima Emily pasaron el resto del verano yendo a visitarla todos los días por lo que Maia ni siquiera pensó en irse con sus amigos.

Cuando volvió a Hogwarts en septiembre parecía que Dorcas se encontraba mejor, por lo que la chica estaba más relajada. Incluso entró en el equipo de Quidditch de su casa, Gryffindor, junto a sus amigos, Alicia Spinnet y Fred y George Weasley. Incluso otro de sus amigos, Lee Jordan había conseguido el puesto de comentarista, y le daba un toque de humor a los partidos.

Pero todo no podía ser felicidad. Dos meses después de las vacaciones de Navidad, la profesora McGonagall la llamó a su despacho para comunicarle que su tía había muerto. Maia sintió como si algo se rompiera en su interior después de eso y tardó en recuperarse. Dorcas y Remus habían sido como unos padres para ella durante todos esos años, ya que habían sido ellos los que la habían criado como a una hija junto a Emily, que sí era hija suya.

¿Dónde estaban los padres de Maia? Bueno, su madre había muerto cuando ella tenía tres años en un ataque provocado por un grupo de mortífagos. Y su padre, en realidad ella prefería decir que no tenía padre. O que su padre era Remus, al que claramente consideraba como tal. Su verdadero padre había hecho tantas cosas malas. Y eso suponía que Maia muchas veces deseara no estar emparentada con él.

Siguiendo con la historia, a Maia le costó mucho superar la muerte de su tía, tanto que se encerró en sí misma y fueron sus amigos los que lograron sacarla de allí, ya durante su tercer año. Porque pasó el verano tras su segundo curso en casa con Remus y Emily, lamentando la pérdida de Dorcas.

El siguiente verano, tras acabar tercero, fue mejor en muchos aspectos. Su tía Mary, una vieja amiga de sus tíos, fue trasladada desde el Ministerio de Magia de Estados Unidos, donde trabajaba desde que acabó la guerra, al inglés, así que muchas veces iba a visitarlos, cosa que todos agradecían. Además, había podido ir varias veces a casa de los Weasley.

Ya conocía a los Weasley, por supuesto. Su tía Dorcas se llevaba bien con Arthur, el padre, por lo que a veces los invitaban a cenar en casa. Molly, la madre, era la mujer más cariñosa y deseosa de dar abrazos que Maia había conocido nunca. Y eso que ella misma era muy hiperactiva y le encantaba dar abrazos. A algunos de los otros Weasley ya los conocía. Había coincidido con ellos en Hogwarts, donde se hizo muy amiga de Charlie, que era amigo de su prima Dora. También conocía a Percy, aunque no había hablado mucho con él.

efímeros · george weasleyWhere stories live. Discover now