Atte: El Destino 「Taekook/Adaptación」

18

Llegamos al aeropuerto y bajé con JungDae en mis brazos. Sentía que en algún momento podría arrepentirme pero no encontraba que me pudiera hacer cambiar de opinión. Las cosas estarían mejor si me iba con Hoseok y continuaba mi vida lejos de Taehyung como debió de ser hace muchos años.

—¡WOOOW!- dijo JungDae viendo que un avión despegaba.

—¿Son lindos, no?- pregunté esperando a que Taehyung bajara las maletas.

—¡Papá! ¡Papá! ¡Mida, mida, mida!- le decía a Taehyung y este solo asintió para luego cerrar el maletero.

—¡Jungkook! ¡Entra! ¡Rápido!- dijo abriendo la puerta trasera del auto.

—¿Que sucede?- pregunté asustado.

—¡Entra, rápido, Jungkook! ¡No nos puede alcanzar!- diablos. ¿En que se metió ahora?

—¿Que sucede, Taehyung? ¡Di algo!- dije mirando a mi alrededor con miedo. JungDae se aferraba a mi con fuerza y buscaba sentir mi aroma para calmarse.

—¡Tenemos que huir!- dijo encendiendo su auto y comenzó a manejar.

No entiendo nada. Absolutamente nada.

—¿De que? ¡Taehyung que hiciste! ¿De quien tenemos que huir?- pregunté abrazando a JungDae con fuerza.

—De una vida separados. Es horrible, Jungkook- ¿Me esta jodiendo?

—¿Que?- pregunté mirándolo sin poder creer y supongo que mi rostro de vio de ser graciosa ya que Taehyung rió.

Mi omega, yo, y hasta mis celulas se habían puesto en alerta y con nuestros sentidos activados para detectar el peligro.

—Que no te dejaré ir. Lo pensé mejor y no, no lo haré. Eres mi omega y JungDae mi cachorro y se te dejo ir me arrepentire y morire de tristeza- aproveché que el semáforo se habia puesto en rojo y bajé del auto. —iJungkook!- gritó Taehyung.

—iEres un idiota!- dije con lágrimas en mis ojos.

Quizás si tenía razones y eran ese pequeño que miraba a Taehyung por sobre mis hombros y el alfa tonto que gritaba mi nombre.

Me giré y vi que Taehyung avanzaba porque los demás autos tocaban la bocina de sus coches para que avanzara.

—¿Y papá?- preguntó JungDae con sus ojitos curiosos.

—Tu papá es un tonto, un alfa tonto- dije besando su frente.

Lo amaba. Lo sentí cuando bajé de su auto al llegar al aeropuerto, cuando recibí los pasajes, cuando me dijo que me dejaría ir, cuando lo vi en la cocina preparando el desayuno para nosotros, cuando nos despedimos en la noche, cuando jugamos con JungDae, cuando curó mis heridas, cuando tomó mi mano en el avión, cuando me dijo que aun me amaba y todo de mi se estremeció, cuando abrí la puerta y estaba allí o simplemente cada vez que me preguntaba: "¿Que hubiese pasado si me quedaba?". Lo sentí, sentí que me arrancaban aquello que crei perder hace tres años, entonces lo supe, siempre estuvo ahí, Taehyung siempre estuvo allí, clavado en mi corazón o quizás, él era mi corazón.

Mi omega levantó las orejas cuando vio a Taehyung caminando hacia nosotros y JungDae se desespero al verlo.

Sonreí cuando él lo hizo y corrió hasta nosotros para envolvernos en sus brazos y ahí, ahi sentí la paz que me hacia falta hace unos años, en ese momento en que los brazos de Taehyung me envolvieron supe que ese era mi hogar y que él tenía toda la maldita razón.

—Te lo prometí hace años, Jungkook. Serás mi omega para siempre y yo sere tu alfa toda la vida sin importar lo que diga el destino. Aunque... empiezo a creer que nuestro destino es estar juntos asi que no compliques más las cosas, si quieres nos vamos a vivir a Wando pero los tres, como la manada que somos- besó mi frente y después se separó.