Atte: El Destino 「Taekook/Adaptación」

16

—¿Ya estas más tranquilo- preguntó Taehyung con JungDae en sus brazos.

—Me dijiste que no te habías acostado con él.- dije recordando las palabras de Jeong. Me dolía porque yo jamás le hice daño, jamás busqué hacer daño, es más, puse en riesgo mi vida y la de mi bebé por salvarlo a él.

—Yo no me acosté con él- dijo Taehyung antes de marcharse con JungDae en sus brazos.

Me puse en alerta junto a mi omega que dejó de dar vueltas y elevó las orejas mirando a nuestro cachorro.

—¿Que haces?- le pregunté acercandome a él.

—Lo voy a dejar en mi habitación, tranquilo- vi como lo dejaba en la cama y después miré a mi alrededor.— No le haré daño a mi hijo- cerró la puerta y me acerqué a ver si no tenia seguro.—¡Jungkook, tranquilo, no le haré daño!- dijo tomando mi cintura para alejarme de la habitación.

—Es mi cachorro, Taehyung, tengo que asegurarme que no le haras daño.- me llevó de regreso a la sala y después me miró al rostro.

—Tienes arañada la mejilla- asenti. Claramente sabia, me dolía casi todo mi rostro. —Espera aquí- su alfa tiro más de su aroma para calmarme. Mi omega lo sintió e iba a relajarse pero sacudió su cabeza y continuó caminando en circulos. —Tu aroma despertará a Dae, tienes que tranquilizarte- dijo llegando con el botiquín de emergencias en sus manos.

—Ahora que lo pienso mejor, exhibi mucho a mi hijo- dije haciendo mi mejilla a un lado.

—¿Recien ahora piensas?- preguntó preparando un algodón.

—Lo sé. Debí dejarlo en el auto contigo- senti su risa y luego apoyó el algodón con ciudado.

—Casi lo matas, casi lo dejas calvo y muerto. Además de que tiene herido el rostro. ¿Crees que me iba a perder como es que mi omega defiende nuestra manada?- lo miré y luego reí. El coraje aún corre por mis venas, siento que no fue suficiente. —Admitire que tuve miedo pero te veías sexy.- golpee su pierna y después besó mi rostro.

—Jeong se metió con lo más valioso en mi vida, mi família es un caos por su culpa, el conocerá mi peor cara. Taehyung, si te molesta que haga esto entonces déjame porque a Jeong no lo dejaré tranquilo. Ese golpe fue para que advertirle, si no se disculpa conmigo, haré que llore sangre- Taehyung se acercó a mi quiso besar mi frente pero lo aleje.

—¡Hey! ¡Solo es un beso! ¡Quiero que te tranquilices y entiendas que me quedaré contigo!- volví a alejarlo y se colocó de cuclillas frente a mi. —Jungkook. ¿Podemos hablar de nosotros? Esta claro que tengo que hacerme responsable de JungDae, de eso no lo dudes, seré un padre para nuestro cachorrito. ¿Y nosotros? Te amo, después de todo te amo- me abrazó por la cintura y recosto su cabeza en mis piernas— Se que sufriste, que te dolió mucho todo esto, yo también lo sentí, Jungkookie, también sentí que me arrancaban algo del pecho.- miré su cabeza y comencé a acariciar sus cabellos.

Continúe acariciando sus cabellos.

¿Que le diría? "Sí, Taehyung, podemos estar juntos otra vez" "No te preocupes, podemos seguir como estabamos antes, olvidaré nuestra separación y el hecho de que mi omega esta ofendido contigo"

—Lo hablaremos luego- me miró y luego asintió pero continuó abrazado a mi.

—Tu... puedes dormir en mi habitación, yo dormiré en la otra habitación, no tienes que despertar a nuestro hijo- cargué a JungDae y este se aferró a mi con sus manitos pero sin despertar.

—Ahí tienes tu habitación, no te preocupes por mi- dije saliendo del dormitorio.

—¡Buenas noches!- dijo mientras yo ingresaba a la habitación.

El enojo se había marchado en gran parte pero eso no significaba que iba a perdonar a Jeong. No lo haría.

En este momento podría estar con Taehyung felizmente casado y con nuestro cachorro pero no, estaba en la habitación de huespedes junto a mi hijo que no podía reconocer a su padre.

Mi omega, estabamos ofendidos y hasta molestos con Taehyung, habia roto nuestro lazo y una parte de nosotros nos decía que no podiamos confiar en el alfa que nos hizo daño.

Lo quería, un sentimiento por él aun quedaba en mi pero no se sentía confuso. Quizás después de tres años mi amor por él se apagó o lo retraje tanto que le cuesta salir a flote.

—O es dignidad—

—También- le respondí a mi omega.

Era lindo, se veía incluso más maduro que antes, había subido un poco de peso pero nada exagerado, su cabello era un poco más largo de lo que recuerdo pero después todo es poco tal como lo recuerdo.

Incluso su alrededor. La casa sigue teniendo la misma decoración que yo elegí, hay pertenencias mias que aún están donde las dejé. Tal vez nunca le prestó atención, incluso mi paraguas esta en el closet de la entrada y mis zapatos también.

Me preocupa enamorarme y que mi omega no quiera volver a responder a los llamados de su alfa. Por el momento, ese lado de mi se encuentra muy ofendido.

—Si me quiere de regreso, tendrá que cortejarnos, como todo Alfa—