A mis pies

Capítulo 44

Siyeon estaba sentada en una de las sillas del jardín de la casa de Bora. Tenía su mirada fija en el cielo mientras respiraba profundamente.

En dos días tenía que ir de nuevo al hospital para que la doctora que la atendió aquel día después de que la golpearan, la revisara y le diera luz verde para poder volver a hacer su rutina de siempre sin la necesidad de estar todo el día acostada en una cama.

Al ya tener la letra de su canción para el proyecto final de su clase, se sentía mucho más tranquila y aliviada de tener una responsabilidad menos. Aún así, no podía cantar victoria, ya que le falta la instrumental de la canción y también practicarla. Pero ya se encargaría de eso apenas le quitaran aquella venda alrededor de su cabeza.

Bajó la mirada hacia sus manos y la dejó ahí por un rato. Mordió su labio inferior mientras de nuevo aquella culpa la invadía.

Bora aún creía que aquella golpiza que se llevó hace una semana fue a causa de querer robarla y no que realmente aquellos chicos habían sido enviados por quien sabe quien  para matarla.

Ya iban al menos dos intentos de homicidio contra ella y aún seguía sin poder pensar en algún sospechoso que estuviera tras todo eso.

-Esto es una completa locura-murmuró en un susurro mientras tomaba su cabeza con sus manos-diablos-se quejó al sentir una leve punzada en el lugar de a herida cuando la tocó sobre la venda

-Singnie-Bora se acercó a la pelinegra y se agachó frente a ella-¿Sucede algo? Estas con la cabeza gacha y pensé que tal vez te duele

-Pues me acabo de lastimar por error. Pero estoy bien-le aseguró la pelinegra-solo agaché la cabeza para descansar un poco

-En ese caso creo que lo mejor será que te lleve a la habitación para que te recuestes-se levantó y con delicadeza tomó el brazo de Siyeon para ayudarla a que se levantara-¿Estas segura de que no te duele la cabeza?

-Absolutamente-cerró sus ojos fuertemente al sentir un leve mareo-creo que levantarme tan rápido después de haber estado mirando el piso, no fue una muy buena idea

-Tienes razón-le dijo mientras comenzaba a caminar con la más alta hacia las escaleras para llevarla al cuarto-¿En qué estabas pensando hace unos momentos? Se te veía muy concentrada

-Oh pues, no pensaba en mucho. Solo le daba vueltas al tema de la instrumental para la canción-respondió-nada muy importante

-Ya veo-comenzaron a subir las escaleras una por una-¿Y hablaste con tu compañera para que te ayudara con eso? Recuerdo que me dijiste que ella fue quien te ayudó a componer la instrumental de la canción que cantaste hace unos meses

-¿Te refieres a Heejin? Pues no he hablado con ella aún, tal vez enseguida le escriba y le pregunte si me puede ayudar con eso-dijo mientras ambas entraban a la habitación una vez subidos los escalones que llevaban a esta

-Bien, así no tendrás que estar pensando mucho en ello para que no te estreses de más-Bora la ayudó a sentarse en la cama-tu recuestate mientras yo voy a la cocina por tu comida y la mía para que podamos ver algo en la televisión mientras nos de ganas de dormir, ¿Esta bien?

-Esta bien-respondió la pelinegra

Bora iba a caminar de nuevo hacia la salida del cuarto, pero Siyeon la tomó de la muñeca rápidamente y jaló hacia ella. Logrando que la castaña cayera en el regazo de la pelinegra.

-¡Siyeon!-Bora miró a la menor sorprendida. Siyeon sonrió de forma inocente mientras rodeaba la cintura de la más baja-¿Qué fue eso?

-Te ibas a ir sin darme mi beso-hizo un puchero-así que solo quería recordártelo