Capítulo 34

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Siyeon frunció el ceño al notar que la puerta de la casa de Bora estaba abierta.

Luego de salir del hospital fue directamente hacia la casa de Bora. Aunque se desvió unos minutos del camino para comprar una cosa para la castaña como compensación por no haberla apoyado antes.

Entró a la casa con algo de desconfianza. Al no ver a nadie cerca, asumió que posiblemente no hubiera nadie en casa. Así que pensó en irse y volver después, pero unos sonidos extraños de la parte de arriba evitaron que lo hiciera.

-¿Hola?-elevó un poco su voz-¿Bora?

-¡SUÉLTAME! ¡AYUDA!-Siyeon se alarmó al reconocer la voz desesperada de su novia

Comenzó a subir las escaleras de dos en dos para poder llegar más rápido a la habitación de Bora. Sentía como su corazón latía como loco y su respiración se volvía irregular.

Caminó lo más rápido que pudo hacia el cuarto de la castaña. Antes de entrar lo primero que notó es el pomo de la puerta roto tirado en el suelo. Así que se preocupó aún más.

La puerta estaba entrecerrada, así que la empujó para abrirla con algo de temor. Apenas pudo entrar al cuarto se encontró con una escena que hizo que la ira recorriera su cuerpo.

Bora tenía sus ojos cerrados mientras que por sus mejillas resbalaban sus lágrimas. Su torso estaba completamente desnudo mientras que Ravn estaba sobre ella besando su cuello de una forma lujuriosa y asquerosa.

-¡¿QUÉ DEMONIOS CREES QUE HACES, HIJO DE PUTA?!-sin dudar en ningún momento tomó a Ravn de los hombros y tiró de él hacia atrás. Logrando que este cayera con fuerza contra el suelo

Bora abrió sus ojos apenas reconoció la voz de Siyeon. Lo primero que sintió fue como la pelinegra la cubría con la camisa que traía antes y había estado tirada en el suelo luego de que Ravn se la quitara. También puso sobre sus hombros la chaqueta que la más alta traía puesta.

-Si-Siyeon...-la pelinegra le dio una rápida mirada y le dio una pequeña sonrisa tranquilizadora

Siyeon devolvió su mirada hacia Ravn que se estaba levantando del suelo luego de que ella lo haya tirado. Sintió de nuevo aquella rabia recorrer su cuerpo.

-Eres una maldito desgraciado-se acercó peligrosamente-¿Tan bajo caíste para intentar abusar de ella?

-¿Y si es así qué?-la retó mientras una sonrisa arrogante aparecía en su rostro-Al final ella igual lo iba disfrutar como la zo...

No lo dejo terminar y le estampó un puñetazo en el rostro.

-No vuelvas jamás a dirigirte así a ella-lo amenazó-no te lo permito

Ravn tocó su boca y pudo notar que de esta salía un poco de sangre. Miró con enojo a la pelinegra y sin dudarlo la golpeó de vuelta en la nariz.

-¡Siyeon!-Bora miró preocupada a la pelinegra que se tambaleó hacia atrás por el golpe propinado por el contrario

-Estoy bien, estoy bien...-le dijo para tranquilizarla

Pasó sus dedos por la parte superior de sus labios y notó un líquido caliente salir de su nariz.

-Eres un hijo de puta-lo empujó fuera de la habitación y fue tras él-te atreviste a tocarla aún cuando ella no quería y encima te regocijas por ello. Eres un asqueroso

-Yo al menos la toqué antes que tú. Tal vez no habré completado mi acto, pero ten por seguro una cosa Lee-presionó su dedo contra el pecho de la pelinegra-Bora tarde o temprano será mía y ni tu, ni nadie podrá evitarlo

A mis piesWhere stories live. Discover now