I HATE.. 𝗟𝗢𝗩𝗘 YOU

CAPÍTULO 22

El estar en una sala llena de personas que no se parecen en nada a ti, te molesta, te incómoda, aún que tengan prácticamente la misa ropa y se vean físicamente igual. Tom caminaba por los pasillos hacia la biblioteca, sus compañeros pasaban de él. No se sentía mal por eso, se sentía mal por que Harry podría llegar a ser uno de ellos en cuanto supiera a qué aspiraba.

En cuanto entró a la locación ahí estaba su amado, pasando cartas y dándole puntos a Hermione o a Ron. Estudiaban por qué tal vez querían ser maestros, Aurores. Recordó cuando hablo con Harry sobre eso.

Flashback:

— Harry – llamó y el mencionado lo miró desde su regazo donde estaba acostado – ¿Que quieres estudiar?

El aire golpeaba al árbol haciendo que se meneara y calleran algunas hojas en el rostro de Harry que miraba al ojiazul mientras sonreía.

— Maestro – cerró sus ojos – siempre eh querido ser maestro, todos esperan a que sea auror pero yo solo quiero enseñarles a las próximas generaciones.

Tom acarició su cabello en respuesta y miró hacia el lago. Un mago poderoso con un maestro no era bien visto por la sociedad mágica. Al menos no por lo que aspira a ser.

Fin del flashback

— Tom, Harry no está siendo justo – le dijo Ron sacándolo de su trance.

— Está haciéndolo bien, eres tú el que no ha estudiado lo suficiente – respondió Hermione por él.

— ¿Estás bien? – ahora lo miraba por detrás de sus gafas, mierda – ¿Tom?

— Necesito hablar contigo – dijo secamente saliendo del lugar y quedándose en el marco de la entrada.

Harry volteo a ver a sus amigos con el entrecejo fruncido y ellos de igual forma, Tom serio, no era buena señal.

Caminó hasta donde estaba su novio y le extendió su mano para que la tomara pero el ojiazul solo siguió caminando con el detrás. ¿Que pasaba?, Tom lo tenía confundido, nunca se portaba así. Bueno, no después de lo que había pasado entre ellos. Las únicas veces que lo había visto portarse tan frío y distante fue cuando le dijo que lo odiaba. No tenía expresión facial pero lo conocía, más de lo que necesitaba hacerlo, sus ojos irradiaba tristeza, sufrimiento.

Tom había decidido, poder o amor. Amarlo o dejarlo. Protegerlo de todos o protegerlo de él.

Llegaron hasta un aula vacía y Tom cerró la puerta detrás de él murmurando algo que no logro escuchar bien. Después de unos minutos de silencio y de que el slytherin siguiera en la misma posición, fue el que habló

— ¿Que pasa? – dijo cruzado de brazos.

— Déjame pensar por favor, no estoy muy seguro de lo que voy a hacer – respondió y solo eso bastó para preocuparlo – solo... dame unos segundos más.

Su pecho se estaba empezando a oprimir, la preocupación, era esa sensación. Tom estaba parado frente a él sin decir nada. Sin darle indicios de lo que podría estar pasando. Solo estaba de pie pensando mientras él tenía millones de ideas en su cabeza, ¿es así?, ¿Así se siente cuando no quieres que algo se vaya de tu vida?

— Está asustandome – Tom levantó su vista y divisó los ojos rojos que esté tenía, ¿Estaba asustandolo?, El no quería eso, el no quería que le temiera – ¿Que sucede?

— Yo debo decirte algo y no estoy muy seguro de que lo apruebes – susurró – no quiero que me temas o te alejes después, quiero que escuches lo que tengo que decir y tengas una mente abierta.