𝐂𝐚𝐩𝐢𝐭𝐮𝐥𝐨 20

72 14 3
                                    

Besé las cicatrices en su piel. Todavía pienso que eres hermoso, y no quiero perder nunca a mi mejor amigo. Grité, "Dios, buitre traélo de vuelta o llévame con él"

— ¡Oh, Beomgyu! Ha pasado un tiempo desde que nos vimos. Sé que eres tú, no me engañas para nada.

Oh, no. Podía reconocer esa voz a cualquier lugar que fuera. Era como escuchar la risa de su peor pesadilla.

Se quedó callado sin querer contestarle, con ganas de colgar pero no poder hacerlo, su brazo temblaba del enojo, de la tristeza, y de la impotencia que sentía en ese momento.

— ¿No hablarás? ¿Eres así de cobarde?

El asesino de su hermano, el maltratador de su madre..

Era su padre.

Después de diez años, no podía creer que aún recordara su voz.

— ¿Cobarde como tú, al querer justificar tus malos actos con la maldita religión? ¿Por llorarle a la abuela diciendo que eras inocente porque dios lo quiso así? No lo creo. — Decidió responderle aún estando temblando como si hubiera un frío inmenso.

Escuchó las graves risas de su progenitor a través del teléfono, un escalofrío terrible pasó por todo su cuerpo.

Oh, ¿así de agresivo recibes la llamada de tu padre? Que horribles modales te ha enseñado Sunmi, esa perra no sirve para nada.

Beomgyu siguió apretando su mandíbula, sin vacilar. No tenía tiempo ni ganas para pelear con una persona como lo era él.

Eso no te importa. ¿Por qué llamas? Deberías estar en prisión ahora mismo. Te condenaron a treinta miserables años, ¿por qué diablos quieres seguir molestando?

— Bueno, tu querida abuela consiguió que me sacaran de ahí antes de tiempo.

— ¿Sobornó a la policía?

— Yo no le llamaría así.

Diablos, eso era inquietante. Sabía que la familia de parte de su padre estaba enloquecida, pero nunca pensó que tanto. No podía creerse que tenía su sangre corriendo por sus venas.

— ¿Por qué estás tratando de comunicarte con nosotros? Nunca te importamos un carajo, si quieres seguir haciéndonos daño ni lo sueñes, a pesar de que eres mayor que yo y mi padre, no te guardaré el más mínimo respeto.

— Oh, ¿por qué? — preguntó cinicamente — ¿Por matar a la puta de tu hermana? ¿Por tratar a tu madre como se les debe tratar a las inútiles de las mujeres? Si te das cuenta, Beomgyu, tú fuiste al único al que nunca traté mal de ninguna manera. Eras el único varón, tenia fé en que fueras la única esperanza. Pero resultaste ser igual que Yumi, maldito maricon.

Tragaba saliva, no sabía de donde sabía tanta información, no sabía quien se la habría dicho, su cabeza era un caos.

— Eso no me hace más o menos hombre — contesta, una risotada de burla se escucha a través del teléfono y el miedo se apodera de él.

— Dejate de estupideces, Beomgyu. — le dice aún riéndose un poco — Eso simplemente te hace un estúpido maricon. Me enteré por ahí, que después de que se mudaran a Corea, te volviste así de marica. Lo sé todo, querido hijo. Sé lo del supuesto Choi Yeonjun, sobre el jóven Choi Soobin. Lo sé todo, ¿y sabes? No permitiré que siga así, los encontraré a ti y a la ramera de tu ma-

𝐓𝐇𝐄 𝐋𝐎𝐕𝐄 𝐀𝐋𝐀𝐑𝐌 𝐀𝐍𝐃 𝐈𝐓𝐒 𝐀𝐏𝐏𝐑𝐄𝐍𝐃𝐈𝐂𝐄𝐒 ; ¹ 𝐭𝐱𝐭 Where stories live. Discover now