Capítulo 243:

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Me sentí rara.

Miré la casa de Angenas. Una mansión demasiado grande situada en el centro del zodiaco estaba ya vacía.

Ya se habían deshecho de los objetos de valor y sólo quedaban los muebles que el próximo propietario de la mansión quería utilizar.

Me giré ligeramente y miré a la gente que estaba de pie frente a la mansión de los Angenas. Cientos de personas, nobles y plebeyos, llenaban los alrededores de la mansión.

Se siente muy raro.

He visto esto en mi vida anterior. Una escena de millones de personas reunidas para ver el fin de una familia. La única diferencia era que entonces la familia era Lombardi, y esta vez era Angenas.

Y fui yo, Florentia Lombardi, quien hizo la diferencia.

─¿Lo hacemos?

Me preguntó el oficial del palacio. Sólo entonces me di cuenta del gran número de ojos que me miraban.

Pherez era uno de ellos.

De todos modos, yo soy el que decide en última instancia, porque el Emperador Jovanes me encomendó el asunto de la Casa de Angenas.

─Cierrenlo.

A mi orden, los soldados imperiales comenzaron a empujar la pesada puerta de hierro.

Los Angenas son expulsados de la mansión y arrestados.

Enseguida, la oxidada puerta de hierro hizo un curioso ruido.

Los soldados, con rostros inexpresivos, se acercaron a toda prisa en cuanto la puerta de hierro se cerró, atando gruesas cadenas al pomo de la puerta.

Chunkyung.

Finalmente, un gran candado con el sello imperial cerró la puerta de la mansión de los Angenas. Quien abriera esa puerta sin el permiso imperial sería culpable de traición.

Pude oír el ruido de una conversación entre los nobles que me rodeaban, pateando sus lenguas.

─Así es como acaba Angenas. ─dijo cínicamente algún aristócrata.

─Sabía que esto pasaría.

Había gente fingiendo.

Ladeé la cabeza en silencio mientras observaba la mansión de Angenas vacía y muerta.

¿Alguien esperaba que esto sucediera?

En la batalla entre Pherez y la Emperatriz, la ganadora prevista era la Emperatriz. Cien de cien personas, pensaban que Astana sería el Príncipe Heredero.

─Vicegobernadora de Lombardi ─al final, el ganador fue Pherez, después de todo. ─¿Estás bien?

Era una pregunta un poco extraña para venir a preguntar de repente. Pero sé lo que quiere decir al preguntar.

─He visto todo lo que quería ver, ahora tengo que irme

─Hmm, llevo mucho tiempo de pie y me duele la espalda.

Al acercarse Pherez, todos los nobles que estaban a mi alrededor salieron corriendo. Debido a este incidente, más y más gente tiene miedo de Pherez. Fue algo bueno para Pherez, que estaba a punto de convertirse en príncipe heredero.

El miedo pronto llevará a un poderoso Emperador.

─¿Vicegobernadora?

Cuando me quedé mirando sin responder, Pherez me llamó de nuevo.

Matriarca Vol. 2Where stories live. Discover now