❁ 𝐈𝐧𝐬𝐞𝐠𝐮𝐫𝐢𝐝𝐚𝐝𝐞𝐬 ❁

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Las inseguridades son un tema bastante fuerte, es algo que, como adolescente, tengo en abundancia, pero, ¿por qué existen?, la pregunta es tan sencilla como compleja, las inseguridades son un reflejo o resultado de tus miedos y dudas, es un percibir que siento varias veces al día, creo no ser la única, pero, por el momento; digamos que las inseguridades son como una espina, una espina pequeña y fastidiosa que se clava en mi corazón cada vez que voy a hacer o decir algo, produciendo así una opresión en el pecho que me hace dudar, ¿lo hago o no lo hago?, es lo que pienso cuando esa espina actúa.

También podría definirlas como una voz — o varias —, que está en mi cabeza y que constantemente se encuentra cuestionando mis acciones.

Cada persona puede darle una definición distinta, empero, las que he nombrado podría catalogarlas como las más acertadas a un nivel general.

Ahora bien, las inseguridades son esa voz o espina que hacen el vivir más difícil, te hacen dudar de tus acciones y las de tus semejantes, te obligan a cuestionar todo y, es en pocas ocasiones en donde — con muchísimo esfuerzo — se logra silenciar, cancelar o apagar a esas malas sensaciones.

Bien, dejando esto en claro, podemos enfatizar que, las malditas inseguridades — sí, son unas malditas perras egoístas — nacen debido a críticas destructivas o comentarios fuera de lugar de ciertas personas, muchas veces de tus familiares, amigos o conocidos. No existirían las inseguridades si las personas no criticaran, comentaran o se burlaran de ti, tu cuerpo o lo que haces, pero es imposible que eso no suceda, es algo humano, una conducta muy común, un ciclo que se repite y se repite, dudo mucho que algún día tenga fin, no obstante, tengo un poco de esperanza. Quiero creer que algún día las personas van a mejorar, que evolucionarán a tal punto que esos comentarios casuales ya no serán dichos o mencionados. En fin, solo es un sueño, un destello pequeño de esperanza.

Existen un número elevado de inseguridades, cada persona lucha con las propias, cada individuo pelea contra sus demonios, cada ser humano gana pequeñas batallas en contra de ellas, empero, también pierde unas cuantas.

Mi familia ha hecho que en mí se desarrollen distintas espinas y voces, pero no son los únicos, algunos de mis amigos, conocidos, maestros o simplemente cualquier persona que se siente con el derecho a decir algo, ha logrado crear o aumentar algunas de mis inseguridades, aseguran tener el derecho a opinar sobre de mí y afirman que sus comentarios no tienen segundas intenciones, empero, con o sin segundas intenciones han logrado afectarme.

No llores.

No prestes atención.

Ignoralos.

No valen la pena.

Eres perfecta, no llores, eres muy bonita, por favor no llores.

Respira, respira, respira, por favor no pares de respirar, todo está bien.

Los comentarios me afectan, pero no lo demuestro, quiero gritar, pero no lo hago, solo sonrío y les hago creer que no me importa, porque sí, aunque les cueste creerlo soy un ser humano — ¡vivo! — que tiene sentimientos, miedos, virtudes y defectos, y lo que dicen o insinúan puede o no afectarme, pero eso ya depende de lo rota que esté por dentro, de lo cuarteada que pueda estar mi alma, ¿pero cómo van a saberlo?, si a ustedes solo les interesa criticar sin tener en cuenta los sentimientos ajenos.

Ahora sí podría aplicar o utilizar algunas de las frases que en el pasado me dijeron...

Reír para no llorar.

Sonríe, si sonríes ellos no podrán dañarte.

Que no te afecten sus estupideces, su idiotez no les permite ver más allá de su nariz.

Pero, ¿y si lo que dicen es cierto?, ¿y si tienen razón?, ¿qué tal si ser como soy está mal?. Me gustaba mi cuerpo, me gustaba ser quien soy, me gustaba hablar sin tener miedo a las críticas. Yo, no lo sé, ¿por qué no logran entenderlo?, me gustan las chicas, pero también los chicos, adoro hablar, me encanta leer, me apasiona escribir, no me gusta ir de fiesta, me gusta la ropa ancha, detesto el maquillaje, no me disgusta estudiar.

¿Por qué siempre quieren criticarlo todo?, vivan y dejen vivir, por favor, déjenme vivir y ser feliz. Hasta hace poco amaba ser yo.

~By Flor Suárez.

Pensamientos de una adolescenteWhere stories live. Discover now