FRIENDS || RYEJI

11

Es por eso que las amigas deben dormir en otra cama.

Era muy pronto, ambas lo sabían, Ryujin estaba molesta por las decisiones apresuradas de su amiga pero siempre recibía la misma respuesta.

—Estamos entrenando para ser artistas siendo adolescentes, Ryu, nuestra vida es rápida desde que nos aceptaron aquí.

—Eso ya lo sé Yeji, ¿Pero ser su novia? Apenas y recuerdas su nombre completo.

—¡Se llama Choi Jisu! —protestó una castaña debajo del cuerpo de su mejor amiga—. Además no soy su novia, solo acepte salir con ella.

—Tu y yo sabemos en que terminará eso Hwang.

—No puede ser —jadeó la mayor haciendo que la morena fijara su vista en ella—. Ya entiendo todo.

—¿De que hablas?

—¡Estás celosa! 

Por su puesto que lo estoy idiota, eres mía. pensó la pequeña.

—El sueño de verdad te tiene loca, ya duérmete.

—Admite que te gusto.

Ryujin puede jurar que sintió su corazón detenerse unos segundos, sus ojos asustados se fijaron en la sonrisa burlona de su amiga, ¿Ella lo sabía?

—Yo-

Las carcajadas de su amiga no la dejaron terminar, maldición, casi muere del susto.

—¡Debiste ver tu cara! —Yeji apenas y podía respirar—. ¡Ouch, basta! —se quejó al recibir varios manotazos en su pecho y brazos.

El tono del celular de la castaña interrumpió el momento, Ryujin no necesitaba preguntar quién era o que a dónde iba a su mejor amiga. Después de veinte segundos al teléfono, Yeji se giró hacia la morena con sus labios apretados.

3, 2, 1...

—Tengo que irme Ryuddaeng, voy a-

—Salir con Jisu, lo sé, diviértete.

La mayor se acercó e inclinó en frente de Ryujin con la intención de darle un beso, pero esta última giró su rostro dejando muy confundida a su amiga. Aún así, no le tomó importancia y salió, no sin antes volver a despedirse.

—¡Ryujin mira!, ¡Ahí va otro! —gritó Chaeryeong señalando a un pato que flotaba a unos metros de ellas.

—¡Es verdad! Es como al que le dimos semillas pero más pequeño —contestó Yuna intercalando su mirada entre aquel pato y Ryujin—. ¿No es lindo?

—Mhm. —murmuró la chica, se encontraba sentada en medio de sus dos amigas, con las piernas abrazadas y pegadas a su pecho. Ella ni siquiera estaba mirando al frente.

—¿Quieres darle de comer? —preguntó la más pequeña apoyando su cabeza en el hombro de su amiga, ella negó.

—¿Quieres ir a comer algo? —preguntó su otra amiga haciendo lo mismo, Ryujin volvió a negar.

Habían pasado dos semanas desde que Yeji y Jisu comenzaron a salir, y una más desde que su mejor amiga acepto salir con aquella chica. Una semana en la que Ryujin no hacía más que salir a comer y a entrenar. Hoy sus amigas decidieron llevarla al lago que tanto le gusta para ver a los patos, pero ni eso funcionó.

—Ryujin, no puedes seguir así —la mencionada rodó los ojos, siempre le decían lo mismo—, tu puedes encontrar a alguien más que-

El sonido del celular de Chaeryeong la interrumpió, segundos después el celular de Yuna comenzó a vibrar al igual que el de Ryujin.

—Nos quieren ver en la compañía, dice que es urgente. —leyó la mayor de las pelinegras.

—¿Qué hiciste ahora Yuna? —amenazó la castaña.

—¡Yo no hice nada! —la pequeña tomó su barbilla con su mano mirando a la nada—. No está vez.

—Tal vez no sea nada, vamos antes de que se molesten.

El trío de chicas se puso de pie, caminando hacia la salida, estaban algo nerviosas, sobre todo Ryujin, se sentía observada. Dió una mirada a su alrededor pero no había nada, o al menos eso pensaba ella hasta que lo vió esconderse detrás de un árbol.

—Chicas —llamó y ellas se giraron—, no encuentro mi brazalete, adelantense ustedes iré a buscarlo.

—¿Te ayudamos?

—No, yo puedo, gracias Chaer. —se giró sonriéndole y volviendo al lago.

Espero unos segundos, después de escuchar un "Déjala, ella nos alcanzará." empezó a caminar y después de unos pasos se detuvo en frente de un árbol.

—Ya te ví, no tiene caso que te escondas.

Por un momento pensó que estaba loca y hablándole a la nada, hasta que por fin, detrás del tronco salió un hombre vestido muy formalmente para estar en un parque.

—Que buen ojo tienes. —comentó riendo.

—Lo sé. ¿Quien eres y qué quieres?

—No puedo darte mi nombre —inició mientras se acercaba a la chica—, aún —se detuvo a un par de pasos de ella—. Trabajo para YG entertainment.

De su bolsillo sacó una tarjeta con sus datos y el número de la empresa, se la ofreció a Ryujin quien la aceptó cambiando sus facciones de una cara sería por una confundida.

—Eres muy talentosa, y no te ves feliz en esa empresa, eres una artista en crecimiento y no puedes explotar tu talento si algo te distrae.

—¿Cómo-

—Ese no es el punto, el punto es que eres una mujer multitalentosa que no debería gastar su tiempo reprimiendose. ¿En qué momento mezclaste tu futuro con los sentimientos, Ryujin?

La cabeza de la chica estaba llena de preguntas; ¿Quién era ese hombre?, ¿Cómo sabía su nombre?, ¿Cómo sabía lo que le pasaba?.

—Si te interesa ser una artista puedes irte de ahí e ir a un lugar dónde serás entrenada cómo una de verdad. —la voz de aquel hombre la sacó de sus pensamientos— Piénsalo Ryujin. —terminó alejándose y dejándola sola.

—Una artista de verdad...—susurró para ella misma guardando la tarjeta en uno de sus bolsillos.

Ese hombre tenía razón, ¿En qué momento se distrajo de su objetivo?, ¿Qué fue lo que pasó? Ryujin no asimilaba lo que estaba pasando en ese momento.

Y menos sabía lo que estaba pasando en la empresa, con cuatro chicas y el ceo esperándola en su oficina.

1/3 para el final.

Gracias por el apoyo y leer las cosas que se me ocurren. ♡