Una Vida Perfecta

Un Beso Incompleto

En la cueva, Shikamaru había prendido una fogata. Temari había ido con su hijo a buscar un poco de comida. Kankuro había cocinado con Shikamaru mientras Temari cuidaba de los chicos. Kiba aun seguía inconsciente. Ali se había removido un poco hace un rato pero no se había levantado. Houki le aguantaba la mano mientras se quedaba a su lado.

Shikadai se acercó a el.

"¿Cómo estás?"

"Bien." Respondió el castaño. "Solo preocupado." Mientras lo decía, el menor rozo sus dedos sobre la mano de su hermana.

"No te preocupes. Ella es fuerte. Despertará." Ambos sonrieron y sintieron como el cuerpo de Ali empezaba a moverse. Ambos giraron su mirada hacia la chica y vieron como abría los ojos.

"¿Ali?" Rápidamente Houki se acercó y Shikadai fue a avisarle a su madre.

"¿Shika?" Houki la miró seriamente.

"No." Contesto medio molesto. "Soy tu hermano." Cruzo los brazos sobre su pecho. "Ya sabes, el que nació contigo. El que siempre está contigo. El que te cuida y protege. Que te ama mas que un chico ciervo."

"¿Houki?" Ante la realización de que era su hermano, se levantó y lo abrazo.

"¡Houki!" Grito de emoción. Todos escucharon el grito de Ali y todos corrieron hacia ella. Temari fue la primera en llegar ya que, de antemano sabía que había despertado. Su hijo había ido a buscarla para que viniera.

"Ali." Llamo la rubia. "¿Como te sientes?"

"Mejor." Contestó. La chica vio la mirada de todos en ella menos la de una persona. "¿Y tío Kiba?"

"Está inconsciente." Contestó Houki. Ali se dio vuelta y vio el cuerpo de Kiba a su lado. El mayor estaba arropado con una sábana. Su cabeza estaba sobre una almohada y su rostro no tenía las marcas rojas únicas del clan Inuzuka. Su protector tampoco estaba, así que su cabello caí sobre su rostro.

"¿Que pasó?" Pregunto Ali volviendo a mirar al resto de los adultos.

"¿Que recuerdas?" Pregunto Temari.

"Bueno hubo una pelea. Kiba nos protegió a mi y a mi hermano y salió lastimado. Yo trataba de curar sus heridas cuando sentí algo pesado caer sobre mi. Luego sentí mi cuerpo volar lejos y caer sobre algo duro. Mi cabeza dio sobre una roca creo."

"Bueno todo eso es cierto."

"Entonces..." Ali giro la mirada y vio a Shikadai parado detrás de su hermano. Sus mejillas se tornaron rojas y desvió la mirada.

"Lo siento." El pelienegro no tenía la culpa en si pero si había sido el quien le había caído encima.

"N-no te preocupes." Tartamudeo. Houki se golpeó mentalmente. ¿Que su hermana no sabía disimular? "No es tu culpa. El villano te aventó y yo solo estuve en tu camino." Shikadai soltó una pequeña carcajada.

"Pero aun así," Continuo Shikadai. "Te diste muy duro en la cabeza, ¿no?" Ali asintió. Ellos parecían que estaban en su propio mundo pero en realidad todos los presentes veían la escena con ojos de ternura.

"Vamos a darle su espacio." Dijo Temari súper feliz. Ella ya había notado las interacciones que ambos habían empezado a tener desde que habían empezado a entrenar juntos. Se dio cuenta que Shikadai actuaba diferente cuando estaba alrededor de Ali. Siempre trataba de retarla en cualquier cosa que hacían. Hasta en misiones que colaboraban se pasaban peleándose. Temari, conociendo a su hijo, y a su esposo, llegó a la conclusión de que su hijo se había enamorado. Después de todo, Shikadai era hijo de Shikamaru Nara. Y los Nara no hacían nada si no es que algo los motivaba. Algo como el amor.

"Espera." Kankuro la detuvo. "Ali, antes de que te desmayaras, querías decirme algo." La mejor lo miro confusa. "Algo de Kiba." La menor recordó.

"Oh si." Ali recordó lo que le iba a decir pero no sabia si debía hacerlo. Después de todo si Kankuro no había preguntado por el, significaba que el no sabía. Y quizás su tío Kiba tenía algo preparado para cuando le dijera. Ali no quería arruinar ese momento. Así que, decidió mentir.

"No me acuerdo." Houki y Shikadai la miraron con extrañados. Mientras que los adultos, en especial Kankuro la miraba confuso.

"¿Estás segura?"

"Si. Lo siento." Kankuro le sonrió y le revolvió su cabello albino.

"No te preocupes pequeña." Con eso todos los adultos se fueron alejando. El único que quedaba era Houki quien no quería dejar a su hermana con el chico ciervo.

"Houki." Llamó Temari. "¿Me puedes ayudar a buscar más leña?" El menor soltó una protesta pero se paró y se fue con la rubia. Ahora si, Ali y Shikadai estaban solos. El pelinegro se sentó a su lado.

"¿Como te sientes?"

"Creo que estaré bien." Respondió. "Solo me di muy duro en la cabeza."

"Si lo hiciste."

"No tienes porque sentirte culpable Shikadai." El pelinegro la miro. "No fue tu culpa." Ali inconsciente de lo que estaba haciendo al momento, acercó la palma de su mano hacia la mejilla de Shikadai. Ambos se sonrojaron pero no se separaron. Se fueron acercando poco a poco hasta que sus rostros estaban justo al frente del otro. Ali podía sentir la respiración pesada de Shikadai sobre sus labios y viceversa. Ambos se miraron a los ojos y luego bajaron la mirada a los labios del otro. Como si estuvieran pidiendo permiso para hacer algo tan prohibido pero al mismo tiempo tan simple.

"¡Ali! ¡Shikadai!" Se oyó el grito de Houki. "La cena esta lista." Ambos chicos se separaron de cantazo y desviaron la mirada. Ambos estaban sonrojados hasta las orejas. Shikadai se levantó primero y le extendió la mano a Ali para ayudarla.

"Gracias." Dijo tan pronto estuvo de pie. El mayor le sonrió y ambos fueron a cenar.

Mientras todos comían, una figura apareció en la entrada. Esa figura se empezó a convertir en muchas y todos rápidos se pusieron en pose de defensa.

"Chicos, chicos." Se oyó la voz de Shinki. Luego se oyó un ladrido de un perro.

Shinki y Akamaru habían vuelto.

"Shinki." Llamó Kankuro. Ambos se abrazaron y Kankuro pasó su mano sobre la cabeza de Akamaru. Luego el canino fue a donde su dueño estaba y se acostó a su lado. Kankuro miró sobre el hombro de su hijo y vio a Jiraiya, Gai, Sakura y Naruto.

"¿Como están todos?" Pregunto Gai.

"Estamos bien." Respondió Kankuro. "Estábamos cenando. ¿Quieren un poco?" Todos asintieron y se sentaron a cenar con ellos.