𝙲𝙰𝙿𝙸́𝚃𝚄𝙻𝙾 𝟽.

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Narrador omnisciente

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Narrador omnisciente

El sol estaba comenzando a salir en Japón en algunos lugares antes que otros, eran las 7 de la mañana y se escuchaba a lo lejos un sonido de una pelota siendo golpeada

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El sol estaba comenzando a salir en Japón en algunos lugares antes que otros, eran las 7 de la mañana y se escuchaba a lo lejos un sonido de una pelota siendo golpeada. Nuestra oji-verde protagonista por esos sonidos se despertó, se sentó en el piso del gimnasio dandose cuenta que todos sus amigos y compañeros aún estaban durmiendo, sin embargo, uno de ellos no estaba presente y era aquel que el día de ayer casi le provocó un infarto. 

Ella se levantó del piso sin hacer mucho ruido y se fue a cambiar, porque con ese frío no saldría con el pijama que llevaba puesto, se puso el uniforme y salió del gimnasio en dirección al campo que no estaba muy lejos, un escalofrío recorrió su espalda por el frío de la mañana pero poco le importó, su objetivo era encontrarse con el mayor y llevarlo dentro del gimnasio. El castaño por su parte, estaba jugando solo con la pelota, tirando a portería de vez en cuando fallando en el intento de anotar y es que, cierta chica de ojos verdes estaba rondando en su mente aunque él no se diera cuenta, su frustración cada vez que no anotaba se transmitían en los gritos de frustración que lanzaba.

Sayuri, lentamente se fue acercando con una botella de agua en mano esperando no interrumpir lo que estaba haciendo Endou pero no funcionó ya que el contrario se dio cuenta de su presencia, él sonrió ampliamente al encontrarse con la tímida pero dulce mirada de la castaña que más de una vez lo distraía de las prácticas y conversaciones que compartían juntos.

—Buenos días, Endou.—saludó extendiendo la botella una vez que el nombrado se acercara a ella. Él tomó la botella y bebió un poco de agua soltando un jadeo de satisfacción al sentir su boca no tan seca como antes.

—Buenos días, Sayuri.

—Veo que despertaste con mucha energía.—sonrió levemente cruzando sus manos detrás de su espalda.

—Oh bueno...—dijo él soltando una pequeña risita nerviosa, no quería decirle que en realidad estaba cansado pero que necesitaba despejar su cabeza de aquella técnica que le estaba quitando el sueño los últimos días.

Secretos || 𝖨𝗇𝖺𝗓𝗎𝗆𝖺 𝖤𝗅𝖾𝗏𝖾𝗇Donde viven las historias. Descúbrelo ahora