sᴜᴍᴍᴇʀ《 Frankenstein 》©

IV

Los cálidos rayos del sol se colaban por las cortinas rojas de la habitación. Los pájaros cantaban en coro y todo estaba silencioso dentro de la casa.

Frankenstein estaba dándole la espalda a Summer con el sudor bajando por su rostro, el tema es simple.

Summer lo estaba abrazando por detrás mientras murmuraba algo, no sabía si despertarla a gritos o simplemente levantarse. El siempre era de hacer las cosas al momento, sin embargo, tenía una crisis.
La chica impedía que el pudiese zafarse de su agarre, hasta que hizo un pequeño truco.
Se escurrió como gusano y colocó su almohada.

Habia funcionado.

El se alivio y agarró su ropa, se metió al baño y en unos minutos salió listo y perfecto como siempre, su rostro mostraba molestia por la chica, quien murmuraba incoherencias, pero la dejo.

Lo primordial era hacer el desayuno para todos e ir a trabajar, pero...¿Qué haría con Summer? Ella podría ingresar a Ye-Ran a estudiar, ¿El problema? No tenía un uniforme. Y si lo conseguía se lo traerían mañana. Soltó un suspiro pesado y salió del cuarto con el ceño fruncido.
Nunca se encontró con tantos problemas con una mujer, tenía que hablar si o si con su amo sobre a ella, aunque no serviría, Raizel había dado una orden clara y directa, el debía de cuidarla por el momento, ella podría ayudarlos a eliminar a Crombel con más facilidad.

Entro a la sala de estar y los vio a todos sentados, excepto Seira y Regis, quienes esperaban alguna orden, como de costumbre.

—Buenos días a todos .Yo me encargaré hoy del desayuno.-Nadie lo contradijo, solo asintieron y el se fue a la cocina, mientras se colocaba el delantal y subía las mangas de la camisa hasta los codos.

Raizel miro disimuladamente a su seguidor, quien tenía una mirada pensativa, estaba seguro de que era por Summer, quien seguía durmiendo. Dejó de mirarlo y se perdió en sus pensamientos.

...

Todos se fueron a sus respectivas tareas, quedando solamente Frankenstein en la casa, molesto, irritado e inquieto, su amo le dijo que debía de quedarse a cuidar a Summer.

En silencio fue a su habitación y abrió la puerta sin hacer ruido, asomo su cabeza y la vio sentada en la cama; su mirada estaba perdida, parecía estar pensando en algo.

Entró lentamente y se acercó a la cama. Ella lo observó y luego sonrió, Frankenstein se extraño al verla así, ¿Hace cuanto estaba despierta?

—¿Cuanto llevas despierta? —Lentamente se acercó a la ventana y abrió las cortinas, pudo oír un quejido provenir de ella; la miro disimuladamente y sonrió. Su ceño estaba fruncido debido a la luz que entraba por la ventana.

—¿Qué hora es? —Preguntó mientras frotó su ojo izquierdo.

De pronto, se paró rápidamente al notar que estaba en la cama, el simplemente frunció el ceño sin entender que le sucedía.