Strings | kooktae |

14.

—Papi... me dejas irme con tito. Porfi porfi porfi.

—Hannie, tito no puede llevarte, además, no te da pena que me quede aquí solo. - la intentó coger, pero la niña se aferró a su tío como si fuera una lapa.

El mayor miró resignado a su hermano, que encogió los hombros sin saber que hacer.

Resopló y volvió a hablarle a su hija.

—Hannie, ¿quieres ir a la cocina para merendar? Y ahora cuando vuelvas hablamos.

La niña asintió sin mirar a su padre y marchó a la cocina con la cabeza gacha.

En cuanto la perdieron de vista, Namjoon se dirigió a su hermano.

—¿Qué opinas sobre llevártela unos días? Sé que contigo estará bien, y que te ha echado mucho de menos. Además, tú podrás prestare la atención que merece. A veces no hablo con ella en días por el trabajo, y eso me parte el corazón. Quiero que se sienta querida, pero no sé de dónde sacar tiempo.

—Yo no tengo problema. Voy al campo para estar tranquilo, pero amo pasar tiempo con ella, y hace tiempo que no lo hago, así que por mí perfecto.

—Me parece estupendo. Siento meterte en estos berenjenales.

—No es ningún berenjenal. Y gracias por dejármela unos días. Supongo que a ella le vendrá bien también pasar unos días de desconexión.

Justo entonces la pequeña, muy contenta y con un plato de galletas en sus manitas.

—Papi, mira lo que ha preparado Nini.

Taehyung frunció el ceño. - ¿Quién es Nini?

—Es una nueva amiga de papi. - contestó la chiquilla.

—¿Por qué no me la has presentado? ¿Y por qué lleva todo el tiempo en la cocina? - reprochó a el mayor.

—No, Nini ha estado antes trabajando con papi en su cuarto.

—Oh... que bien. - dijo mirando a su hermano perplejo.

—Taehyung, hablemos primero con Hannie de eso.

—Claro. Tú cambia de tema. - dejó de mirarlo para volverse a su sobrina. - Hannie cariño, ¿qué opinas sobre venirte conmigo al campo unos días?

La niña agrandó mucho su sonrisa y se abalanzó sobre su tío.

—Sí, tito porfi llévame. Porfi.

Tras hacer como el que lo pensaba, sonrió a la niña. - Está bien. Mañana vendré a recogerte.

—Gracias tito, te quiero mucho.

—No me las des cariño. Yo también te quiero mucho.

—Yo también os quiero. - se metió el padre de Hannie. - Y claro, tienes mi permiso para ir con tu tío de viaje. Gracias por preguntarlo.

La chiquilla rio, haciendo que los demás lo hicieran también.

—Me voy a preparar mi maleta y a decírselo a Nini. - dijo la niña saltando por el salón antes de correr escaleras arriba hacia su cuarto.

Tanto el tío como el padre se quedaron embobados mirándola, saliendo de sus ensoñaciones en cuanto desapareció de sus vistas.

—¿Me vas a contar lo de esa tal Nini? ¿Estáis saliendo? - cambió su semblante.

—Nini es una chica que conocí hace un mes. En realidad, se llama Jennie, pero Hannie ha decidido llamarla así. Jennie es una chica increíble, no le importa mi trabajo y le encantan los niños. Pasa mucho tiempo con Hannie últimamente. Y no, no estamos saliendo de forma oficial. Estamos conociéndonos, pero se puede decir que a lo mejor se convierte en la nueva madre de Hannie. Además, no creas que está conmigo por dinero. Tiene un trabajo bien remunerado.

Taehyung se sorprendió ante los datos que su hermano le estaba dando. No creía que él saliera con nadie, y mucho menos que la llevara a casa tan pronto.

—Vaya, me alegro mucho por ti. - dijo a pesar de su confusión. - ¿Me la presentas?

—Claro... enseguida vuelvo. - contestó el más alto yendo a la cocina a avisar a su nueva acompañante.

Volvió con una chica de pelo negro, como su Kookie. Tenía una cara preciosa, y al lado de su hermano se veía muy bajita. Todos se veían bajitos al lado de él. Pero nada comparado con ella.

—Hola, tú debes de ser Jennie. Yo soy Taehyung. - la saludó con su mejor sonrisa, haciendo una reverencia a modo de saludo.

—Sí, encantada, Nam me ha hablado mucho de ti. Y Hannie también. - respondió imitándolo.

Hablaron durante un buen rato, hasta que, cómo no, el teléfono de Taehyung sonó y se vio obligado a dejar la conversación durante un momento.

Al ver de quién se trataba una sonrisa boba apareció en su rostro.

—¿Kookie? - lo saludó.

—Hyung, ¿cómo estás? - respondió con brío.

—Muy bien. Estoy en casa de mi hermano, y mañana me voy con mi sobrina al sitio que te dije.

—Creo que acabo de ponerme celoso de tu sobrina. Ojalá ser ella.

Ambos rieron hasta que Jungkook volvió a hablar.

—Oye... en media hora entro en el centro de desintoxicación. Quería que lo supieras. Estaré incomunicado, por eso te he llamado antes, además de que supongo que a dónde vas no habrá mucha conexión, así que solo era por eso.

Taehyung no paraba de sonreír. Jungkook lo hacía sonreír.

—Gracias por llamar. Siento no haberlo hecho yo, es que he llegado a casa y luego he venido directamente a aquí.

—No te preocupes... bueno, tengo que colgar. John va a venir a hacer el papeleo y tal, y tengo que firmar y todo eso.

—De acuerdo. Pues supongo que esta vez sí es de verdad la última despedida.

—Eso parece.

—Te echaré de menos.

—Yo más.

—Hasta pronto Kookie.

—Hasta pronto, te quiero. - terminó de decir casi en un susurro, y antes de recibir contestación alguna, colgó, dejando a un Taehyung con el corazón palpitándole demasiado.

Podía incluso imaginarlo allí con ese brillo en los ojos y esa sonrisa tan peculiar.

Taehyung volvió al salón, aun sintiéndose como si estuviera en una nube, y se sentó con su hermano mirándolo con extrañeza.

—¿Quién era? - preguntó ya por curiosidad.

—Jungkook. - dijo todavía con esas dos últimas palabras del menor resonando en su cabeza, que, aunque ya se las había escuchado antes, le habían soñado tan melódicas en esa ocasión.

"Te quiero"