Capítulo 8

122 16 11
                                    

Era domingo, por ende, todos los que vivían cerca al pequeño templo donde Finn predicaba se reunieron en el mismo para escuchar las enseñanzas que tenía por dar. No hace falta decir que Lady Amilyn de Holdo estaba presente, sentada en primera fila, al igual que el resto de su familia. Y por supuesto Jannah y Rey también estaban en primera fila, pero del otro costado del altar.

Por cuestiones del destino, Benicio se sentó junto a Rey y ella no tuvo ningún problemas con ello, al contrario, le agradaba el rubio. Al principio, todos los asistentes estaban atentos a lo que decía Finn, pero después de media hora de haber empezado la ceremonia, los niños se aburrieron y se distrajeron; y varios adultos empezaban a quedarse dormidos.

La castaña sintió que sus párpados se estaban volviendo más pesados y para no quedarse dormida decidió hablar con el hombre a su lado - ¿Se quedará por mucho tiempo en Chandrillia, coronel? - le preguntó.

- Me quedaré el tiempo que sea necesario - respondió - En especial ahora que estoy sirviendo nuevamente las órdenes de mi padre y de mi primo; por lo cual estoy completamente a disposición del último.

- Parece que todos siempre están a disposición del señor Solo - dijo Rey de forma acelerada, pero al mismo tiempo pensando en la extraña cadena de mando que tenían en el ejército. En especial en la división de los Jedi.

Benicio sonrió - Pues, con la situación actual que pasa la nación; creo que es lo mas obvio.

Esa palabras resonaron en la cabeza de la castaña - Me preguntó porque él señor Solo no se casa y asegura la perpetuación de su especie - comentó con desdén.

El rubio volteó un poco para mirarla - En cuyo caso, la dama en cuestión sería una mujer afortunada.

- ¿A sí? - preguntó ella sarcástica levantando una ceja.

- Mi primo es un hombre muy leal - comentó Benicio - Según me enteré cuando llegue aquí, hace poco salvo a uno de sus amigos justo a tiempo.

Rey abrió un poco sus ojos sorprendida, pues nunca había pensado en el señor Solo como alguna clase de héroe sin reconocimiento - ¿Qué sucedió? 

- Al parecer lo salvó de un matrimonio imprudente - dijo el rubio sin pensar en las consecuencias.

- ¿Quién era ese hombre? - preguntó Rey sin poder elevar la voz. 

Acto seguido, ella se quedó callada, un poco avergonzada y esperando la respuesta del hombre a su lado. Cuando no hubo una respuesta instantánea; sospechó lo peor. El sonido de un trueno se hizo escuchar por el templo.

Benicio agachó un poco la cabeza, ya no había marcha atrás y de seguro se llevaría una reprimenda de parte de su primo por haber abierto su gran bocata - Su mejor amigo, el señor Armitage Hux.

- ¿El señor Solo le dio algún motivo en especifico para interferir? - preguntó Rey, ahora mirando mas allá del rubio para visualizar el perfil de hombre mencionado.

- Según entendí, habían fuertes objeciones hacia la dama.

- ¿Fue por su falta de fortuna? - dijo casi sarcástica.

El joven Skywalker suspiró - Creo que su familia era considerada "Inadecuada".

En ese momento, Rey sintió como si algo dentro de si se rompiera en mil pedazos - Así que los separó - dijo concluyendo, para recibir un simple asentimiento de cabeza del Benicio.

Ella siguió mirando el perfil de Ben Solo, atónita por lo que había descubierto. Hasta que fue sorprendida por este mismo y ella volvió a mirar al frente. No pudo seguir prestando atención a lo que su primo decía. No  tenia cabeza para nada en ese momento.

Pride and Prejudice || Reylo AUWhere stories live. Discover now