→ Tori Hānta es la segunda hija del líder de un poderoso y particular clan, ella siempre pensó que nació para convertirse en un Shinobi exepcional que sea capaz de seguir órdenes sin dudar, pero la llegada de personas muy particulares en su vida cam...
Oops! This image does not follow our content guidelines. To continue publishing, please remove it or upload a different image.
── LOS HÉROES EXISTEN ──
Tori despertó a las 6 am en punto, abrió sus ojos de golpe como si de una máquina se tratase y se alisto en cuestión de pocos minutos, su sensei ya se encontraba despierto junto con Sasuke y pasados diez minutos o más, Sakura se hizo presente, hoy acompañarían todos al constructor de puentes con excepción de Naruto que lo dejarían dormir un poco más, debido a lo cansado que estaba.
— Esta seguro de que se encuentra bien, usted aun sigue en recuperación — hablo la hija del señor Tazuna con preocupación dirigida hacia Kakashi.
— ¿Por qué? ¿Acaso me veo tan mal? — interrogo el de cabellos platinos.
— Pues feo si es — comento Tori en susurro escuchado por Sakura quien rio.
El resto del camino en dirección hacia la construcción del puente fue tranquilo, demasiado, la azabache sentía una extraña sensación que quería ignorar, pues era la emoción que sentía de poder experimentar la adrenalina una vez más.
Más su sorpresa fue enorme cuando todos los trabajadores se encontraban tirados en el piso, de inmediato una espesa niebla comenzó a esparcirse con gran rapidez, a penas podía visualizar a sus compañeros de equipo y al constructor de puentes.
Kakashi se alarmo y de inmediato dio sus instrucciones.
— ¡Sasuke, Sakura, Tori! ¡Prepárense! — de inmediato los genins se agruparon para proteger al señor Tazuna.
— ¿Es Zabuza, verdad? Este es su jutsu— habló Sakura
Tori se mantenía callada, observando y escuchando el más mínimo movimiento que se generara.
— Kakashi veo que aun tienes a esos mocosos pegados a ti — la voz de Zabuza a altero a la azabache quien a pesar mostrarse tranquila, empezaba a tener una extraña y desconocida emoción en su interior — Oh mira ese todavía tiembla
Dijo Zabuza refiriéndose a Sasuke.
En un abrir y cerrar de ojos, los clones de Zabuza los rodeaban mirándolos con malicia.
Y una sonrisa de arrogancia se instalo en el rostro de Sasuke al ver los clones destruidos.
— Estoy temblando por la emoción — dijo el Uchiha.
— No nos subestimes tanto, los clones ya no son suficiente — dijo la de orbes azules.
— ¡Adelante Sasuke, Tori! — Sasuke tomo con fuerza su kunai , mientras que Tori hacía lo mismo y rápidamente se deshicieron de la los clones de agua.
Extrañamente empezaba a sentir una emoción nueva, rara y novedosa.
Además sentía algo raro en sus ojos que le permitía distinguir entre un clon y el real, una picazón molesta.
