¡Me gustas!

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— ¡Me gustas!

La niña bonita parpadeó ante Taehyun, sus ojos brillaban de alegría y felicidad, y tal vez un poco de timidez. Después de todo, ella acaba de confesar sus sentimientos a un chico guapo y popular en su universidad. Sus nervios estaban inestables y su corazón latía con fuerza fuera de su pecho.

Esto es, finalmente lo hizo. ¡Finalmente reunió el coraje para preguntar si podía hablar con Kang Taehyun a solas y él dijo que sí! Siempre era educado y era tan guapo. No podía creer su suerte.

Así que, conteniendo el aliento, esperó a que él dijera algo a continuación. Era difícil leer su rostro, Taehyun era un estudiante algo distante. Sin embargo, ese pequeño espacio que mantiene entre él y los demás es lo que aumenta su encanto. Cada persona que se enamora de Taehyun solo quiere ser la que finalmente llene ese vacío, anhelan estar más cerca de él. Si lograron ser los únicos a los que Taehyun no se mantuvo al alcance de la mano, entonces incluso pueden llegar a decir que son especiales. La idea era embriagadora: ser la persona especial de Kang Taehyun .

— Ok, genial — Fue la tan esperada respuesta.

Soltó el aliento, un poco confundida.

Taehyun no dijo nada más, y continuó mirándola con hermosos ojos que no tenían familiaridad o emoción en absoluto. Ni por un solo segundo sus ojos reflejaron la alegría que estaba sintiendo en ese momento.

Sin embargo, ella no se dejará disuadir. Todo el mundo sabe que no es fácil acercarse a Kang Taehyun. Ella escuchó las historias de muchos otros antes que ella, en esta situación exacta, siendo rechazada por su franca cortesía.

— Entonces... ¿saldrás conmigo? Se mi novio — Ella aclaró, uniendo sus manos detrás de su espalda con ansiedad. No quería que él viera lo nerviosa que estaba. Kang Taehyun fue inteligente y se dio cuenta de todo.

— No — Taehyun la rechazó rotundamente. No fue un duro 'no', fue... solo un simple... 'no'.

Ahora estaba desesperada. Su esperanza se deslizaba rápidamente entre sus dedos.

— P-pero... me gustas — Fue todo lo que tuvo que decir, tragándose el nudo en la garganta.

Taehyun continuó mirándola directamente a los ojos, y todavía no había... nada.

— Ya dijiste eso. ¿Qué quieres que haga al respecto? — Preguntó genuinamente. No estaba siendo malo, solo seguía siendo una cortesía fría que de alguna manera lo empeoraba mucho.

Se quedó allí en silencio, el momento se prolongaba. Taehyun no fue grosero, no se alejó. Esperó pacientemente a que ella respondiera. No era un idiota, trataba a todos con justicia. Fue una de las muchas razones por las que a tanta gente en el campus les terminó gustando una vez que se cruzaron con él.

— Yo... no sé — Respondió con sinceridad — No pensé que llegaría tan lejos, si soy honesta —  Fue solo un momento de valentía lo que estaba sintiendo ese día, y con el aliento de sus amigas, aprovechó esa oportunidad de valentía y se acercó a él antes de que pudiera retroceder.

Así que aquí estamos ahora, en este momento que no fue planeado.

Taehyun finalmente recogió la situación y decidió poner fin a esto. Respiró hondo para ayudarlo a reunir toda su paciencia y buena voluntad.

— Está bien, bueno, ¿qué esperabas? — Le preguntó a ella — ¿Querías que te felicitara? ¿Quieres que te devuelva la confesión? Ni siquiera te conozco . Nunca trataste de conocerme a nivel personal, nunca te acercaste a mí antes, así que esencialmente eres una extraña para mí. Ni siquiera sé tu nombre. Antes de este momento, apenas te reconocí en mi clase de literatura. Hay otros 50 estudiantes al menos que comparten la clase con nosotros, ¿cómo se supone que te reconoceré con todas esas caras en la multitud? Ahora que me confesaste, ¿qué planeas hacer después?

Hey... ¿Adivina qué?Where stories live. Discover now