-No, no estoy bien -murmuró ella con una risa temblorosa.

Abby, que había reparado en su inusitada palidez, se sentó a su lado.

-¿Quieres que te traiga algo, Selena? -le susurró.

-No, gracias, estaré bien... si te llevas a Justin lejos de mí -dijo alzando la vista hacia él furiosa.

-No te preocupes, ya me iba -le espetó él irguiéndose y dirigiéndose al otro extremo de la mesa.

Selena no sabría jamás cómo había sobrevivido a aquella noche. Contestaba a las preguntas de los invitados y sonreía como un autómata. En un momento dado, logró escabullirse con la excusa de retocarse el maquillaje, y Abby la siguió arriba, a la habitación de invitados.

- ¿Qué ha ocurrido, Selena? -le preguntó sin preámbulos.

-Para empezar, estoy embarazada -le respondió Selena muy tensa.

Abby se quedó boquiabierta.

- ¡Oh, Selena...! ¿Lo sabe Justin?

-No, no lo sabe, y no quiero que se lo digas -se apresuró a advertirle Selena sentándose en el borde de la cama-. Vuelve a estar furioso por lo que le hice hace seis años. Durante unas semanas pareció que todo iba bien, pero cuando volvió de Wyoming no lo reconocí. ¿Y cómo voy a contarle lo del bebé cuando me odia? No quiero su compasión... -se llevó las manos al rostro-. Nunca funcionará, Abby, no puede dejar atrás el pasado, y yo ya no sé qué hacer... No lo soporto más.

Las lágrimas empezaron a rodar por sus mejillas, y Abby fue a su lado a consolarla como pudo.

-¿Y qué piensas hacer? -le preguntó con suavidad, mientras Selena se secaba las lágrimas con un pañuelo.

- Me iré a Houston. Tengo una prima allí, y sé que no le importará que me quede un par de días con ella, hasta que averigüe qué hacer con mi vida.

- ¿Y si intentaras hablar con Justin? Sé que te quiere, Selena.

-Bonita manera la suya de demostrarlo -repuso Selena con ironía -. ¡Primero me dice que vamos a llevar vidas separadas y luego trae a... a esa sabandija aquí!

-Bueno, creo que al menos se habrá dado cuenta de que no estabas enamorada de él -dijo Abby con una sonrisa, recordando cómo le había arrojado aquel florero.

-Y lo peor es que cree que mi padre era un santo. Acaba de decirme que le dio dinero para reflotar el negocio... No me extraña que piense que yo le miento

-Necesitas descansar -le dijo Abby-. ¿Por qué no te acuestas? Yo haré de anfitriona en tu lugar, le diré a Justin que...

-¿Qué tienes que decirme? -inquirió Justin apareciendo en ese momento.

Las dos alzaron la vista, sobresaltadas.

-Hay una chica que pregunta por ti -le dijo Justin a Selena -. Una Tammy no-sé qué. Dice que trabaja contigo en el bufete...

-¿Qué quiere?

-Está subiendo. Ahora podrás preguntárselo tú.

Y en efecto, al momento asomó la cabeza de Tammy. Se quedó un poco cortada al ver el cuadro.

-Um... Lo siento, veo que no es un buen momento...

-No, Tammy, espera, ¿qué ocurre? -dijo Selena levantándose y reteniéndola por el brazo.

La joven se volvió hacia ella con los ojos brillantes.

-Solo venía a decirte que... ¡me ha pedido que me case con él! -casi chilló como una adolescente histérica-. Mira, ¡hasta me ha comprado un anillo! -le dijo mostrándoselo emocionada-. Ha sido una suerte que se haya decidido, porque estoy segura de que toda la ciudad estaba empezando a murmurar. Amanda Jones, una de las dependientas del supermercado nos vio el otro día besándonos al señor Holman y a mí en el despacho, imagínate... la cortinilla estaba echada, claro, pero podía verse desde fuera... qué vergüenza...

Justin..... Un vengador Enamorado ~jelena~(adaptada)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora