💛Prólogo💚

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NARRADOR💥

El cielo estaba nublado y opaco, denotando que el invierno estaba más que incorporado más que nunca al pueblo. Entre sus calles, una familia caminaba con aires de tristeza, la madre llevaba una hermosa cesta llena de comida mientras sus hijos iban frente a ella, jugueteando entre ellos.

—¡Mamá!, ¡Jason acaba de pegarme!

—¡No seas chillón, Dorian!, apenas te toqué.

La señora Branson miró a sus tres hijos, sabia que los dos menores eran más revoltosos, pero la actitud de su hija mayor es lo que más llamaba su atención. Su primogénita siempre había estado muy atenta a sus hermanitos, sobre todo cuando se enteró de su reciente embarazo. Pero ese día se notaba distante, como si algo no estuviera bien.

—Chicos, no hagan escándalos— pidió el padre con voz calmada —. Llegaremos donde la abuela dentro de poco y no quiero que estén peleando.

Ambos chicos asintieron, el menor corrió un poco hacia adelante para tomar la mano de su hermana.

La caminata hacia la casa de Wilma Branson fue un tanto larga, o al menos así le pareció a la señora Branson, ella decidió adjudicarle su cansancio a sus tres meses de embarazo.

La puerta fue abierta por Norma Branson, la hija menor de Wilma, la cual la estaba cuidando de su operación.

—¿Como ha estado mamá, Normi?— preguntó Hall Branson a su hermana.

—Estable, los doctores dicen que su recuperación va bien, que ya paso la prueba de riesgo.

Escuchar esas palabras complacieron a Hall y su esposa, los niños entraron en la casa corriendo. Janine dejó la cesta sobre la mesa mientras observaba como su esposo y cuñada se abrían paso por las escaleras en dirección a la habitación de su suegra. Vio a sus hijos esperándola a los pies de la escalera.

—¿Por que no subieron con papá?

—Queremos subir contigo, mami— respondió su hijo menor, tomando su mano.

Ella subió la escaleras junto a sus hijos, podía ver que ellos estaban nerviosos por ver a su abuela.

Wilma Branson siempre había sido una mujer testaruda y llevada a sus ideas, por ende cuando enfermo, no le comento a nadie sobre sus dolencias, hasta que un dia en una reunión mensual familiar, se descompenso por completo delante los ojos de todos, pero lo peor, fue que cayó frente a Hallie y Jason. Las pesadillas que ambos tuvieron fueron terribles, los pobrecitos apenas habían logrado dormir en dos dias.

Al llegar al segundo piso, avanzaron hacia la habitación de Wilma. El olor fuerte a vainilla y canela invadió sus fosas nasales, causándole nauseas. Entraron en la habitación.

Hall y Norma estaban hablando animadamente con su madre, ella lucia bastante recuperada, bueno, tanto como lo podías estar después de una operación a los riñones. Dorian fue el único de sus nieto en acercarse a su abuela, mientras que Hallie y Jason estaba a una distancia más prudente.

Wilma miró a sus nietos mayores. —Vengan a darle un abrazo a la abuela.

Los hermanos compartieron una mirada, Jason se atrevió a acercarse, pero Hallie no, ambos padres decidieron no decirle nada a su hija.

Estuvieron alrededor de una hora con la abuela Branson, conviviendo de la mejor manera y compartiendo los deliciosos dulce que había preparado Janine.

—Me alegra saber que estas mejor, mamá— comentó Hall tomándole la mano.

—Mi niño, no me voy a ir de esta tierra tan rápido, eso tenlo por...

Un gran grito interrumpió a la abuela. Hallie estaba en la ventana, mirando hacia el bosque mientras gritaba, llevó sus manos a su cabeza y comenzó a tirar de su cabello rubio.

—Hallie, cariño, ¿Qué sucede?— le preguntó Janine arrodillándose a su lado.

La chica pareció no oír a su madre y siguió gritando, el vidrio delante se agrietó. Jason se acercó a su hermana mayor y la abrazó, la chica curiosamente dejó de gritar y se aferró su hermano.

Janine miró el vidrio, aún sin creer que su pequeña hija lo había agrietado con solo un grito. Un temor le recorrió la sangre.

—¿Que demonios paso?— preguntó Norma mirando a su hermano y cuñada.

—Janine...— soltó Hall viendo a su esposa, ella solo lo miró.

—Tenemos que irnos, ahora.

Rápidamente Hall se despidió de su madre y hermana, tomó en brazos a Dorian y salieron como un rayo de la casa. Como si fueran fugitivos de la justicia, avanzaron a paso rápido hasta su hogar, una vez dentro llevaron a sus hijos al sótano, para que nadie tuviera ni la más mínima posibilidad de que alguien ajeno a la familia escuchara.

—Hallie, mi pequeña estrellita- comenzó Hall acunando el pequeño rostro de su hija —. ¿Qué paso?

—La abuela no va a vivir— soltó la pequeña de once años con los labios temblorosos.

—¿Por que dices eso, hija?— esta vez le preguntó su mamá.

—Lo escuché— tocó sus orejas —, la abuela Wilma morirá dentro de poco.

Y tal como lo había dicho Hallie, la abuela Branson falleció dos dias después de su visita. Durante el funeral, Norma no paraba de preguntar a su hermano por el comportamiento de su sobrina, la cual en esos momentos estaba un tanto alejada de todos, tomada de la mano de su hermano Jason.

Hall prefirió no contestar a las preguntas de su hermana, no por que no tuviera respuesta, más bien por que ella no lo comprendería, al igual que le resto de su familia.

Al terminar el velorio, Hall y Janine tomaron a sus hijos y caminaron hacia un parque cercano, esperando distraerles la mente a los niños mientras ellos hablaban con más tranquilidad.

—Creí que ya no quedaba nada en mi linaje— comentó Janine con voz entristecida —. He desgraciado a mi pequeña.

—No digas eso, querida, no tenias forma de saberlo— la consoló su esposo pasando su manos por sus brazos.

—No es tan simple, Hall— prosiguió la mujer —. Durante décadas mi familia a estado evitando que esto pasara, eliminar por completo esa parte de nuestra descendencia. Y ahora, Hallie la tiene.

—Hey, se que no es fácil, de hecho, si mi padre no me hubiera dicho hace años sobre todo este mundo oculto, creó que no habría podido creerte.

—¿Que es lo que vamos a hacer?— los ojos de la mujer se cristalizaron.

—Quererla, cuidarla, enseñarle sobre este mundo nuevo y enseñarle lo más que podemos sobre lo que ella es.

—¿Crees que podemos con esto?

—Claro que si, después de todo— sonrio acariciándole la mejilla —, no todos los dias se tiene un sobrenatural en la familia.

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¡EL PRÓLOGO DE LAZOS PERVERSOS YA ESTA AQUÍ!, ¡NO ME LO PUEDO CREER!

Primero que nada y antes que todo, quiero agradecer por la hermosa portada a BulmaSakamaki, ella ha sido la creadora de las tres portadas de la saga Lazos Sobrenaturales y no le podría estar mas agradecida por el bello trabajo que hizo con ellas.

Bien, ahora, la razón por lo que les reuní aquí hoy (JKAJSAS), ¡MIL GRACIAS POR HABERLE DADO UNA OPORTUNIDAD A MIS HISTORIAS!, por ustedes, por su apoyo y cariño es que ahora me encuentro escribiendo el tercer libro de ese mundo sobrenatural, no se imaginan lo agradecida que estoy.

Los capítulos de Lazos Perversos serán subidos en una semana más o menos, quiero organizar bien mis ideas y ver como arreglo mis horarios con la universidad, pero muero por compartirles las locas ideas de mi cabeza jkskaas.

¡De nuevo, muchas gracias por leer a mis bebes!

¡Besos!, Fer.

Lazos Perversos [Libro 3]Where stories live. Discover now