Yo Soy Raijin Hatake (El Hijo de Kakashi Hatake)

Capítulo Veintinueve: ¡Yo Soy Raijin Hatake!

En un par de horas a los aldeanos se les permitió volver a la aldea, la cual ya no era la de antes.

- ¿Para qué nos habrán reunido aquí? - Se preguntaban algunos estando frente a la torre Raikage.

- ¿Qué planean el sin cara y su amigo raro? - Preguntó Naruto que se encontraba junto a los demás que al igual que la gente, no tenían ni la menor idea de lo que pasaba.

- ¿Podrían prestarme su atención por un momento? - Dijo el pelirrojo que estaba en la sima de la torre.
- Les explicaré el porqué los cité aquí.

- ¿Estás seguro de esto, Naoko? - Le preguntó el castaño en susurro ya que estaba a su lado.

- Confía en mí.
Se dirigió a la gente.
- Como ya sabrán todos, la aldea fue destruida por una gran batalla contra la Raikage Akane, la cual ya no será una carga.

Muchos festejaron en ese punto, pues ya no serían esclavos del miedo por la mujer.

- ¡Escuchen! - El pelirrojo volvió a llamarlos. - Muchos de ustedes me han preguntado sobre quién será el nuevo Raikage o si al menos habrá uno nuevo. De eso quería hablarles.
Le dio una mirada rápida al castaño antes de seguir. - Creo tener a la persona correcta para ese puesto.

En ese instante le hizo la señal a Raijin para que se acercara.

- ¡¿Raijin?! - Se preguntaron todos sus camaradas algo sorprendidos.

- ¿Qué no ese chico es el hijo de la Raikage?

- Si, puede que nos traiga mayor desgracia que su madre si se hace con el puesto.

- Además que parece un chico de 12 años.

- No creo que sirva.
Todo esto lo murmuraban muchos.

- Te dije que era mala idea esto. - Murmulló Raijin, listo para salir de ahí, pero no contaba conque su amigo le frenara tomándolo de la manga.
- ¿Qué haces, Naoko? Ya está, no seré el Raikage.

- Aguanta un poco, hermano ¡Pónganme atención!

Todos guardaron silencio.

- Sé que piensan que darle el puesto al hijo de la anterior Rakage que sólo nos trajo desgracia es de locos.

- Naoko, no estás ayudando.

- ¡Shh! - Éste lo calló y siguió - Pero, díganme, ¿ustedes saben quién nos salvó de la Raikage?

Todos se vieron y comenzaron a discutir.

- Un desconocido. - Contestó finalmente uno.

- Pues déjenme decirles que ese "desconocido" - Dijo haciendo comillas con los dedos. - es nada más ni nada menos que este chico. - Y jaló al mentado para que diera la cara.
- Quien los salvó fue el hijo de la Raikage.

En ese momento volvieron a la conversación.

- ¡¿Ahora entienden el porqué creo que es indicado?!
Todo se volvió silencioso.
- ¡Porque demostró que le importa mucho más su aldea que el mismo poder de su madre! ¡Casi muere por el precio de salvarnos a todos! ¡¿Con eso tienen o quieren más?!

- Naoko...

- Es tu turno, hermano.
Le sonrió y lo dejó al frente.

- Uh... Entiendo que desconfíen de mí y no los culpo, pero si me dieran una sola oportunidad podría demostrarles que puedo con el papel.

Volvieron a las discuciones, cosa que ponía nervioso al muchacho.

- ¡Mamá, mira, es él!
Un grito de un niño llamó la atención de todos.