Cinco: Magia parte dos

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N/A: Caí ante las suplicas de Elisa .-. 

NOTA: Para que se entienda un poco más, los flashbacks irán en cursiva.

—Desde que te fuiste, las cosas no han sido iguales... 

Avada kedavra. 

El hechizo impactó a centímetros de Elisa, Scar fue un tanto imprecisa ante la debilidad que su cuerpo sentía. El sujeto que torturaba a su amiga reaccionó ante el hechizo e intentó contratacar. Ambos tenían una lucha de hechizos imperdonables, y parecía que Scar perdería. No se encontraba en el mejor estado y por ende su magia iba perdiendo más intensidad al paso de los segundos. 

Cuando el secuaz de Voldemort estaba a escasos metros de ella, dispuesto a terminar con la vida de ambas chicas, Melissa, que previamente se había encargado de los otros sujetos, se acercó para ayudar. Rodeó al tipo con un hechizo de incendio y cuando pudo distraerlo, lo atacó repetidamente utilizando expelliarmus. La chica Hufflepuff no lo mató, pero lo dejó muy mal herido, al igual que a sus demás compañeros. Rápidamente se acercó a Elisa y la cogió en brazos. 

—No, por favor, no —Melissa observó las graves heridas que tenía por todo el cuerpo. Un sentimiento de impotencia y dolor invadía su ser—. Vulnera Sanentur.  —Utilizaba un hechizo para curar las heridas profundas.

No respondía. Podía observar como su respiración era casi imperceptible y no paraba de sangrar.

—Recuerda cuando estábamos sentadas solo tú y yo —Creía que la escuchaba—. Yo tomaba tu mano, podía sentir como estabas nerviosa y tú... estabas a punto de besarme. —Paso su pulgar sobre los labios enrojecidos de Elisa y aunque tenía poca esperanza de que en algo ayudará, la besó. 

Seguía sin reaccionar, por lo que Melissa comenzó a llorar, mientras se mantenía apegada a el cuerpo de la que pudo haber sido su chica. Scar continuaba aturdida y debilitada, pero a pesar de su estado, se arrastró hasta sus amigas, divisó la situación y lanzó al cielo luces en señal de ayuda, esperando a que alguien de Hogwarts las viera. 

(...)

La directora en compañía de un par de maestros repasaban la situación, ellos estaban al tanto del cometido imperdonable. No habían hablado con ninguna de las chicas hasta el momento, querían que se recuperarán para poder contar los hechos. 

En una cama de la enfermería, Elisa descansaba. Después de un par de días inconsciente, al fin despertaba de su trance. Le tomó un par de segundos reincorporarse, y cuando a su mente volvieron algunos flashes de los sucesos, se levantó como pudo y aún cojeando, fue a la oficina de McGonagall. Por suerte estaba ahí y en cuanto la directora la observó y a pesar de estar molesta con ella, le ayudó a tomar asiento. Pasaron largas horas discutiendo lo que había pasado. 

(...) 

Después de que Melissa le avisará a Scar que Elisa despertó, ambas se encaminaron a buscarla por la enfermería, pero no estaba ahí. Pensaron que tal vez ya estaría de nuevo en su vieja habitación, pero al llegar observaron que todas sus partencias habían desaparecido. Las dos chicas  fueron directo a la oficina de la directora  para obtener respuestas.

 —Elisa vino está mañana Confirmaba—. Me habló sobre el grave incidente que causo al llevarlos ahí. Tuvieron suerte de regresar con vida y sin daños permanentes a comparación de ella. 

—¿Dónde está? —Preguntaba Melissa comenzado a desesperarse. 

—La señorita Galina también mencionó ser la responsable de lanzar el hechizo imperdonable...

One-shots of Elisa GalinaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora