Capítulo 63

6.3K 418 65
                                    

*Escuchen la canción cuando yo les diga ¡AHORA! *

Cuando Blake pregunto a qué hora me recogería ya tenía en la mente que debíamos salir de noche, más específicamente a la hora de dormir de mama. Hoy no pude estar mucho tiempo con ella, ya que me comprometí con Jessi a ayudarla a estudiar, últimamente estaba más... normal. Ya no me agredía sin razón ni actuaba como una perra en ningún sentido, parecía dócil y tímida, no sabía que bicho le pico ni tampoco quería averiguarlo.

Mi tía me pregunto que me había pasado en la cara y sin darme tiempo de responderle, negó con la cabeza y puso una mano en mi hombro ahorrándome decirle lo que mi madre me hizo. No fue a propósito, ambas lo sabíamos, pero aun así era demasiado difícil, esta mucho peor que hace un año. Antes yo podía controlarla y ahora no puedo ni siquiera hablar con ella.

Ahora estaba preparándome para salir con Blake. Opte por usar una falda negra que me compro mi tía con una blusa con escote. Si, hoy me sentía atrevida.

Estaba pintando mis labios de rojo, cuando...

—¿Sales con Donovan? —dijo Dave, asustándome. Se apoyo en el umbral de mi puerta, tenía los labios apretados y sus manos estaban apretándose mutuamente, nervioso.

Mierda.

—No, no voy a salir con Donovan —avisé mientras terminaba de ponerme mis zapatillas y agarraba mi bolso para salir. Al tratar de pasar de él, me tomo del brazo muy fuerte.

—¿Qué hablamos Celina? —Empecé a forcejear con el— ¿Quieres que tu mama este aquí? ¿O que la cuiden en un lugar de mala muerte donde nunca podrá salir? ¿Qué quieres?

Logre zafarme de su agarre y me aleje unos centímetros de él, no podía huir de esto.

—Para mañana quiero que me des algo. Lo que sea. Sino es así, ya no seré tan paciente contigo —dice mientras se retira a su despacho. Mi brazo aun dolía donde me agarro.

No sé qué voy a hacer a estas horas de la noche.

***

—Lamento haber cambiado de opinión a altas horas de la noche —Le hice saber a Blake mientras bajábamos de su auto. Ver el bar donde me llevo Donovan hace un tiempo hizo que recuerdos me atropellaran hasta casi descompensarme un poco. Casi podía sentir su mano sosteniendo mi cabello mientras vomitaba o sus manos tocando todo mi cuerpo en aquel viejo sofá.

—Dios, no hay problema. Bailar un poco es mejor que ir a cenar —dijo mientras tenía una sonrisa de oreja a oreja.

Era tan dulce. Blake me hacía sentir tan cómoda, sinceramente sentía que no había ni una pizca de maldad en este ser humano. Además de ser lindo, sí. ¿Como no iba a darle una oportunidad? Es una de las pocas personas que siento sinceras en todo este maldito lugar, contando a mi tía y a Cris, no salvo a nadie.

—Gracias, pero la próxima iremos a cenar donde tú me dijiste —afirme, esta vez, creyéndolo en serio. Quería seguir saliendo con él.

—Wow, ni siquiera tuvimos una primera cita y ya sé que tendremos una segunda, debí causarte una buena impresión —bromeó chocando muy ligeramente su brazo con el mío.

Me reí y negué con la cabeza mientras empezamos a caminar hacia la puerta del bar. —En realidad, no es que me caíste bien, solo que me das pena, desde que me invitaste a salir sé que no eres muy bueno en socializar con la gente. De hecho, tus padres me pagan por estar contigo.

Él frunció su ceño mientras ponía sus manos en sus bolsillos. —Mis padres murieron hace un par de días, así que...

Revolee los ojos mientras mordía mi labio, conteniendo la risa. —Si, claro.

No confíes en mí © (Terminada)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora