✨twenty-one✨

93 12 11
                                    

Han

Desperté en mí habitación, tumbado sobre el blando colchón de la cama, unos suaves rayos de sol que se colaban por la ventana fueron los causantes de mí despertar. No podía recordar nada de anoche, que pasó después de llegar al bar, como había ido la noche ni como había llegado a casa, lo único que sentía era confusión y un gran dolor de cabeza, quise saber que hora era para saber cuando había dormido aproximadamente, cogí mí teléfono y vi que eran las seis de la tard, mínimo había dormido nueve horas.

Me levanté de la cama y fui a la cocina ya que Minho estaba de espaldas lavando unos platos usados el día anterior para cenar.

- Buenos días. - Dije con la voz ronca sentandome en una de las altas sillas detras de la encimera.

- Ji... - Minho se dio la vuelta al escucharme con un puchero en su boca y los ojos cristalizados.

- Oye, oye... ¿Min que pasa? ¿Por qué lloras? - Le dije bajando de la silla y acercándome a el para sostener sus mejillas con mis manos. ¿Que sucede? - Dije apenado.

- Ayer... ¿No lo recuerdas? Te desmayaste en mis brazos... - Dijo él sin evitar sorber su nariz y sofocar un sollozo.

- Yo... Solo recuerdo que últimamente me duele un poco la cabeza pero nada más. - Dije honestamente

- Tenemos que ir al hospitar Ji... - Me pidió el peli-naranja.

- No hace falta Min... Es solo por la fatiga, no estoy acostumbrado a trabajar fisicamente y mí cuerpo a reaccionado así... Ya verás como pronto iré acostumbrandome y ya estaré igual de fresco como siempre. ¿Está bien? - Le dije revolviendo su cabellera ondulada.

Lo único que recibí a cambio fue una mueca de duda, no sabía sí se había quedado conforme con lo que le había dicho por lo que le sonreí sinceramente y trate de cambiar de tema.

- ¿Que quieres hacer hoy? Ya es Domingo y mañana nos toca empezar otra semana de trabajo... ¿Quieres ver alguna película juntos? - Le dije pellizcando su mejilla.

- Bueno... Suena bien... - Me dijo y así como le propuse vimos la película en lo que quedaba de tarde, ya que como había dormido gran parte del día no quedaba mucho de esta.

- Oye... Sí mañana pasa algo en el trabajo llamame, ¿Si? - Me dijo Minho con preocupación.

- Claro, pero no me sucederá nada, me tomaré unas medicinas, no te preocupes por eso, ¿Si? - Le dije y después de eso, como el reloj ya marcaban las diez de la noche decidimos ir a dormir temprano.

...

La noche pasó rapido, durante ésta desperté varías veces con dolor de cabeza, finalmente decidí levantarme y adelantar con algunas cosas ya que no podía dormir por las punzadas, estaba deseando que mí cuerpo se acostumbrara al esfuerzo físico para dejar de sentir esos dolores...

Cuando Minho se despertó y me vio desayunando se acerco abrazandose a mi y apoyando su rostro en mí pecho.

- Buenos días. - Me dijo acurrucandose

- Buenos días. - Le respondí acariciando su pelo.

- ¿Te sientes mejor hoy? - Me preguntó levantado su rostro y mirandome a los ojos.

- Si, me vino bien dormir. - Mentí para no preocuparlo más. - Hoy tengo turno doble por lo que entraré antes y saldre más tarde, no me esperes para cenar.

- Esta bien... - Me dijo.

...

Minho

Llegué al taller donde trabajaba, mí jefe como siempre me dio la bienvenida y luego se fue a su despacho a trabajar mientras yo atendía en el taller tranquilamente, la tarde pasó de lo más normal como siempre, algujas revisiones, gente que pedía consejos sobre coches y poco más... Pero justo antes de cerrar vino un último cliente, este era elegante, vestia un traje de apariencia costosa y con un maletín en sus manos.

- Buenos días, ¿El joven Lee? - Me preguntó mientras se acercaba a mi lentamente.

- Hmm... Si, soy yo, ¿Que se le ofrece? - Le pregunté algo dudoso y nervioso.

- Verá, tengo entendido que conoce al joven Han. - Me dijo.

- Depende... ¿Quién es usted? - Dije algo agobiado.

- Soy un empleado de la familia Han, el secretario de la madre del señorito. - Informó. - Solo venía a comentarle que have poco dimos con vuestro paradero. Si, vine yo para no complicar las cosas, los padres de Han creen que sí vienen ellos huiriais otra vez, por lo que aquí es donde entro yo. - Continuó.

- ¿Y? - Dije.

- Déjeme terminar joven. Como habrá podido notar después de un mes conviviendo con el joven Han es que le suele sangrar la nariz, dolores de cabeza, agotamiento e incluso desmayos, ¿Verdad? - Dijo él.

- No, no hasta ayer. ¿Por qué? ¿Que le sucede? ¿Está enfermo? - Dije, esta situación comenzaba a sacarme de mis casillas.

- Si, lo esta. Sus medicinas se las daban sus padres sin el conocimiento de Han. - Informó nuevamente. - Pero al irse ya no las toma. Sí usted realmente ama a Jisung rompa con él o desaparezca, así él volverá a casa y no morira. Lo dejamos en sus manos, obvio no puede enterarse de su enfermermedad, creemos que si corazón no podría aguantar ese shock. - Explicó.

- No... - Dije mirandolo con asco.

- Yo no soy el enemigo Lee... Solo quiero el bien del pequeño Han, yo lo vi macer, crecer y todo... Por favor, dejelo ir, por su bien. Y sí el destino así lo quiere volverá a juntar vuestros caminos, pero ahora no es el momento. Sí me das tu dirección puedo ir mandandote información de como se va recuperando Han. - Dijo.

Yo no sabía si fiarme, sí no hubiese tenido pruebas de todo, pensaría que lo que me decía era pura mentira y chantage pra que Jisung volviese a Seoul pero lo que sucedió ayer... Me hacia ver que quizás si era verdad, y yo no era tan egoista como para anteponer mí amor a su salud, debía hacer lo correcto, y sí lo correcto era desaparecer, eso haría.

- ¿Me da una semana? Para despedirme. - Dije tristemente.

- Obvio, pero no se tarde mucho, su salud es delicada. - Me dijo y tras acordarlo todo se fue por donde había venido.

Una semana...

🌸

¡Hola!

Soy llanto. Los que ya me conocen saben que me gusta mucho escribir dramas aún que la pase ✨mal✨

Al final creo que lograré hacer unos 30 capítulos, siento no poder alargarlo más 🥺

¡Los leo!

Byeee~

DifferentDonde viven las historias. Descúbrelo ahora