Mi omega |KookTae|

END

Taehyung se despertó en medio de la noche con un ansia terrible e insaciable de limones. Sintió que literalmente daría su pierna derecha por una canasta de limones en ese momento. Sus antojos se habían vuelto más intensos durante los últimos meses a medida que su hijo crecía dentro de él.

Trató de darse la vuelta y volver a dormirse, pero solo fue efectivo durante unos minutos. Suspiró mientras tomaba su teléfono y vio que eran casi las dos de la mañana.

Pero sabía que no volvería a dormirse hasta que comiera algo de limón. Se escapó del agarre de Jungkook y justo cuando estaba a punto de levantarse de su lugar sentado en el borde, Jungkook gimió y escuchó su voz somnolienta.

— ¿Bebe? ¿A dónde vas? —

—Lo siento mucho, amor. No quise despertarte. Voy a correr a la tienda muy rápido. Vuelvo enseguida. —

Jungkook se sentó y se acercó a él, presionando un beso en su hombro.

— ¿Ahora mismo? ¿Está bien? ¿Te sientes enfermo? —

Taehyung sonrió cuando Jungkook tocó su frente con el dorso de la mano y luego le tomé el pulso. Su Alfa era tan dulce. Todavía era un shock para él que hubiera encontrado a un hombre tan maravilloso para cuidarlo.

—No, Alfa. Yo... Esto es vergonzoso, pero realmente necesito limones. —

—Oh, antojos ¿Dijiste limones? —

—Sí, no sé porque ahora mismo, en medio de la noche, pero realmente necesito un limón—

Jungkook volvió a besar su hombro y una de sus anchas palmas, acarició el vientre redondo de su Omega.

—Hmm, si estas deseando cítricos podría significar que necesitas más vitamina C. Los antojos de un omega embarazado son a menudo una guía de lo que tu cuerpo necesita—

— ¿De verdad? —

—Sí, pero ven aquí y recuéstate. Correré a la tienda, no quiero que salgas solo en medio de la noche. — Dijo Jungkook empujando suavemente a Taehyung de regreso al nido.

—No, no tienes que hacerlo. Sé que tienes trabajo mañana. Realmente puedo ir— Dijo Taehyung, mientras se dejaba llevar de regreso a su lugar cálido y envuelto en muchas mantas.

—Está bien bebe, vuelvo enseguida. Descansa aquí y te traeré limones. Sé que puedes hacerlo, pero no quiero que salgas en medio de la noche amor. No es seguro para ti ni para el cachorro— Susurró Jungkook y pasó una mano sobre su vientre de nuevo.

—Muchas gracias, mi Alfa—

—Cualquier cosa por ti mi precioso Omega—

Él y su lobo estaban completamente enamorados.

Sus hormonas estaban constantemente causando estragos en su cuerpo y después de meses de soledad que lo empujaban constantemente en todas direcciones como un mar sacudido por una tormenta, tenía a Jungkook una presencia sólida y estable en su vida que lo puso a tierra y le dio toda la fuerza.

Cosas que necesitaba. Ni siquiera podía comparar a Jungkook con nadie, eso sería una broma. Jungkook fue tan gentil con él y sintió una devoción en él. Algo más profundo que la lujuria de la atracción sexual, aunque eso estaba ahí. Fue algo que Taehyung también sintió. Un poderoso deseo de mantener a este Alfa con él, que él era el padre de su cachorro y eso era todo.

Quizá fue solo la aprobación de su lobo lo que marcó la diferencia. Pero desde el momento en que conoció a Jungkook, su lobo había confiado en él.

Taehyung vio a Jungkook vestirse rápidamente y recibió otro beso en los labios antes de irse. Se quedó medio dormido en su nido todavía deseando limones.