CAPITULO 4

2.8K 444 449
                                    

Sungchan se reía mientras iba al volante mientras Haechan seguía peleando en el asiento de atrás por vestirse.

- Tengo mucha curiosidad, pero no creo que sea buena idea que me digas, apenas unas horas atrás me dijiste que no y ahora que quieres decírmelo no estoy tan seguro de querer saberlo.

Haechan al fin pudo terminar de ponerse el pantalón y lo miró.

- Serás mi cómplice, así que tú sueldo también aumentará.

Sungchan apretó los labios.

- No se cómo sentirme con eso.

Haechan se puso los tenis y volvió a hablar.

- ¿Porqué?

Sungchan volteó a verlo en un alto.

- Creí que habías dicho que somos amigos.

- Y lo somos.

- Entonces no necesito el dinero.

Oh.

Se sintió muy avergonzado.

- Perdón, yo... Es una costumbre muy fea que tengo, lo siento, crecí resolviendo mis problemas de esa manera, perdón.

Sungchan sonrió.

- Será un gusto guardar tu secreto sin dinero de por medio.

- Gracias amigo.

Sungchan asintió.

- Entonces dime ¿En qué estás metido?

Haechan se mordió el labio nervioso.

- Yo... Soy alguien decente ¿Sabes? Pero.... Bueno, es qué...

- ¿Es algo malo? ¡Vamos! No te voy a juzgar ¿Qué es?

- Conocí a alguien.

Suerte que había un alto si no hubieran tenido un feo accidente.

- ¿Estás teniendo una aventura?

Haechan lo miró sorprendido.

- ¿Qué? No no no, sólo... Es un amigo pero...

Sungchan no se lo tragó, él mordió su labio nervioso.

- Ya veo, es por eso el cambio de ropa y todo.

Haechan asintió.

- Sí, entonces necesito de tu ayuda por qué hoy vamos a ir a un bar pero obviamente no puedo ir contigo así que te mandaré mi ubicación y me recogerás, pero necesito que te quedes e mi casa, ya sabes cómo a veces lo haces solo para que Jeno no sospeche nada.

Sungchan asintió.

- Solo espero que sepas lo que haces.

Bueno... Él también esperaba eso.

Cuando llegó a la tienda de conveniencia Mark ya lo estaba esperando, realmente se sorprendió al verlo.

Ahora no tenía puesto el uniforme del trabajo, si no su propia ropa, así que pudo notar rápidamente como la playera se pegaba a su torso, era más ancho de hombros de lo que había pensado y también era más fornido. Mark llevaba una chamarra colgada de su brazo.

- Hola, lo siento, ¿Te hice esperar mucho?

Mark le sonrió y negó.

- Acabo de salir ¿Fue bien tu día?

Asintió con una pequeña sonrisa, ¿Como era posible que una pregunta tan sencilla lo hiciera tan feliz?

- Sí, todo bien.

Love of the Million - MarkhyuckDonde viven las historias. Descúbrelo ahora