Siempre fuiste tú // hernygetta

Capítulo 5

Herny:

El mundo al que llegamos era tan diferente. Miré todo a mi alrededor, ese mundo era virgen, ningún otro jugador había llegado.

Apenas llegamos, conocimos a Elyas, un chaval muy buena onda. Al principio se me hizo chulo su vestimenta, ¡Era como SuperMan!

Vegetta habló con Elyas y le explicó todo, supongo que ellos dos junto con Lexosi y Fargan habían creado un plan para hacer todo esto.

Realmente me gusto el nuevo mundo. Para ser sincero siento un poco de pena por Vegetta, porque las primeras semanas todo fue un caos. Sé que le costo mucho cuidar de todos nosotros. Incluso Elyas, la debió pasar mal, pero es que los cuatro somos un desastre. No sabíamos absolutamente nada y era muy complicado para mí entender las cosas porque me distraigo mucho.

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Pasamos cinco meses aprendiendo de Vegetta y Elyas, ambos fueron unos grandes maestros. Incluso conocimos a un nuevo amigo, Alexby.

En Halloween hicimos una hoguera, en ella contamos historias de terror, la verdad no tenía miedo, pero era divertido ver a los demás atentos a la narración. Sin poder evitarlo me fije en Vegetta, que estaba sentado casi en frente mío, sus ojos brillaban a la luz de la fogata, se veía tranquilo y muy bonito con la luz que le daba. Suspiré. Convivir con él mucho tiempo, hizo que mis sentimientos evolucionaran, si antes creía que era un chico guay, ahora siento que es el amor de mi vida. Cómo pase a está situación.

Estaba tan perdido viéndolo, que él noto mi mirada sobre su persona. Lo vi mirarme y note su sonrisa, mi corazón latió como loco dentro de mi pecho. Le correspondí la pequeña sonrisa y aparte la mirada nervioso.

Las horas pasaron, todos se fueron a dormir. Yo seguía despierto, camine por las calles vacías de Wakanda Oasis, era de noche, el frío era soportable. Me senté en una de las bancas cerca de lo que fue la hoguera, observe el cielo y las estrellas brillaban como los diamantes.

Escuche unos pasos suaves, voltee a ver quien era. Vegetta se estaba acercando a mí, sentí "mariposas en el estómago" mis mejillas se calentaron. Se sentó a lado mío y yo simplemente le sonreí.

— ¿No puedes dormir? — me preguntó.

Moví la cabeza negando — no, además el cielo esta hermoso, quería verlo.

— Herny — llamo mi atención — quiero ser honesto contigo, espero que puedas escucharme hasta el final — habló con tanta seriedad y calma.

Por el cambio de ambiente tan repentino, simplemente asentí con un pequeño ruido. No sabía que podría decirme, pero deseaba escucharlo.

— Vale, Herny. Ya hace más de medio año que nos conocimos, me siento muy cómodo contigo. Ambos tuvimos una buena química. No pensé que te cogería tanto cariño, pero es que eres una persona tan amable y tierna, es imposible no querer te — soltó un suspiro — en pocas palabras, Herny, me gustas, desde hace un tiempo siento cosas por ti.

Esas palabras aceleraron mi corazón, mis manos temblaron y mis labios también, sentí una enorme emoción recorrer mi cuerpo, mis ojos no pudieron evitar aguarse, las palabras no me salían. Realmente me dejó sin habla en ese momento.

— Vegetta... — estaba tranquilo, o eso es lo que yo vi, me miro con una sonrisa. Sin pensarlo me acerque a él, sostuve su mano derecha, estaba helada (y eso que él siempre ha sido muy cálido a comparación de mí). No podía hablar por los nervios, pero hice mi mejor esfuerzo.

— Vegetta, yo también siento cosas por ti, pero realmente no sabía como decirlo — era verdad, siempre temí arruinar mi amistad con él.

— ¿Entonces, quieres salir conmigo? —  conociendo a Vegetta, él siempre ha sido directo y no le gusta dar vueltas en los asuntos. Por supuesto que acepté y sin decirle nada le di un beso en la mejilla, de pronto sentí pena y aparte mi mirada a otro lugar. Él se rió por mi actitud y sin decirme nada me tomo por la barbilla y me dio un beso. Nuestro primer beso, el primero de muchos y que me hizo enteramente feliz.

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