LXVII

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Al llegar a la cabaña, cerrando la puerta detrás de ellos, TaeHyung fue directamente hacia sus pertenencias, buscando el cuaderno mientras JungKook hablaba.

—Me dijo que JiMin está en un tratamiento para volver a caminar, pero que quiere dejarlo.

TaeHyung asintió, pasó las páginas hasta que encontró la primera en blanco, escribiendo rápidamente.

"Me dijo que no están peleados".

JungKook hizo una mueca.

—Creo que sí están algo peleados. — dijo. — Yoon dice que discutieron, porque él no quiere que deje el tratamiento.

"Minnie dice que no es seguro que pueda volver a caminar".

—Es un proceso largo... pero debe creer en él para lograrlo, al igual que en el tratamiento, esforzarse un poco y no abandonarlo... sino, nunca tendrá resultados.

TaeHyung asintió, ambos quedaron en silencio unos segundos.

—YoonGi dijo que hablaron fuerte acerca del tema... Que JiMin terminó llorando y él lo dejó así.

TaeHyung frunció el ceño con eso.

"Está mal".

—Si, ya lo golpeé por eso. — JungKook suspiró. — Le dije que deben hablar bien, tranquilos, sin gritos... es lo mejor.

Tae asintió.

"Minnie se siente mal por lo que pasó".

—Ya lo creo. — murmuró JungKook.

El pelinegro caminó hacia TaeHyung, sentándose a su lado, sobre la cama donde el mudo dormía.

El castaño no tardó en acomodar su cabeza en el hombro de JungKook, suspiró pesadamente.

—Qué fácil la gente puede complicar el amor. — murmuró el pelinegro, TaeHyung asintió.

El chico mudo buscó la mano de JungKook, tomándola y entrelazando sus dedos, ambos sonrieron.

—Nunca complicaría nuestro amor, ¿sabes?

TaeHyung asintió.

—Me gusta estar contigo, Tae, estoy tan enamorado de nuestra relación como lo estoy de ti.

El chico se ruborizó, escondió el rostro en su mano libre, separándose del hombro de JungKook.

El pelinegro sonrió, le parecía adorable cuando TaeHyung se ponía así, esperó a que el chico lo mirara, para tomar su mejilla con suavidad, uniendo sus labios en un lento y cariñoso beso.

—Te amo. — susurró, mirándolo a los ojos.

"Te amo" dijo en señas el otro, sonriendo tan ampliamente que sus ojos se escondían sobre sus abultadas mejillas.

"Te amo" dijo en señas el otro, sonriendo tan ampliamente que sus ojos se escondían sobre sus abultadas mejillas

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Mute¹ | kookv.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora