El hijo de Thor #1|N. Horan| En edición.

25 'Suegros'

Como siempre, mi dios nórdico no está ebrio, resiste tan bien el alcohol que comienzo a creer que es inmune. Ami no para de quejarse, Harry no ha dicho nada, tiene los ojos cerrados pero sé que la cabeza le esta matando, Camila, para mi suerte está cuidando a Liam y Louis no ha parado de beber agua.

-Chicos, tomen esto –reparto a todos incluyendo a Niall un vaso de agua y una aspirina.

Las horas pasas y  aun estamos  todos juntos, menos Harry, comento estar muy cansado, pero yo entendí de inmediato que solo quiere alejarse de esta reunión de parejas empalagosas, lo acompaño a la puerta mientras me siento mal por él, se que necesita a alguien, pero el solo quiere a una  persona, esa persona no está disponible, suspiro, beso su mejilla y él se aleja.

Pasan las horas, la aspirina funciono, los chicos se encuentran un poco mejor, les doy una taza de café, al terminar todos suspiran con alivio, el dulce sabor de la cafeína pasa por mi garganta, es un energizante para mí y para ellos.

-Hasta luego –Dice Camila y sale con Liam, los siguen Louis y Ami.

-Amelia, por favor, no olvides venir la semana que viene, no quiero dejar la casa sola –digo cuando ella se despide bajo el dintel de la puerta.

-Claro Lizzy, les deseo buen viaje –besa mi mejilla y la de Niall –se que se divertirán mucho.

-No olvides llamar –dice Lou con su típico tono paternal.

-Claro Tomlinson –beso su mejilla, se despide de Niall.

-Adiós –Amelia sonríe, y los veo marcharse en el auto.

El sábado en la noche, descubro que Niall no tiene pasaporte ¿Cómo viajara?

Camino por toda la casa, mi cabeza da vueltas y no sé cómo solucionar esto sin comentárselo a él, es algo imposible, de inmediato nota mi preocupación, pero trato de disimular la importancia que esto tiene.

-Un amigo de mi padre puede ayudarnos –comento esperanzada.

Caminamos por las tristes y peligrosas calles del centro, agradezco estar con un rubio musculoso de 2 metros, me hace sentir protegida y segura.

-Hola –murmuro al entrar en un local, mal oliente y sucio.

-¿Elizabeth? –preguntan desde dentro.

-¿Papá? –pregunto nerviosa.

-¿Qué haces aquí? –pregunta en tono autoritario, joder, me da dinero cada vez que se acuerda de mi existencia y viene ahora a creerse una figura autoritaria sobre mi ¿eso está bien? ¡NO!

-Nada que te importe –ruedo los ojos y paso por su lado.

-Elizabeth –dice con tono dulce el rubio a mi espalda –no es manera de hablarle a tu padre –espeta y sé que está a punto de enojarse, nunca se ha enojado conmigo. Suspiro.

-Bien –digo de mala gana –papá estoy aquí porque necesito un favor de Stan.

-¿Qué favor? –pregunta en tono ¿preocupado? – ¿estás metida en problemas?

-¿Estas bromeando? – Niall aclara su garganta.

-Elizabeth –dice Niall en tono frio.

-No, solo quiero ir a Paris y Niall necesita un pasaporte –suspiro y ruedo los ojos.

-¿Niall?

-Niall, te presento a mi padre, Lucas Hamilton–Niall se acerca y estrechan sus manos –Papá el es Niall –lo miro –mi novio.

-¿Novio? ¿Ya tienes edad para eso? –y aquí está de nuevo, el ‘padre’, ruedo los ojos.

-¡Stan! –Grito evitando a mi padre – ¿Dónde cojones estas? –suspiro ruidosamente y el anciano sale.