El rey demonio (𝚃𝚘𝚍𝚘𝙱𝚊𝚔𝚞)

Capítulo 8 - Problemas amorosos

Ese día había amanecido soleado y fresco, el clima era perfecto para pasear. Esta vez, Kenta había asistido a todas sus clases y había cumplido con todos sus deberes, así que solo esperaba que Katsuki decidiera si era suficiente para acompañarlos.

Katsuki sonrió al ver la ansiedad en el rostro de su hijo mientras esperaba a que él decidiera. Volteó hacia Shouto, quien estaba a su lado frente a la casa de los dragones, y este le sonrió.

—Bueno —inició Katsuki fingiendo duda —, no estoy muy seguro de si es suficiente para que vayas.

—Si es suficiente —dijo Kenta, luego se volteó hacia Shouto —. Papá, dile que es suficiente.

Shouto sonrió y se agachó al lado de su hijo —Solo si prometes portarte bien y no alejarte de Katsuki mientras estén en el bosque.

—¡Lo prometo! ¡No me alejaré de papi! —dijo rápidamente.

—Entonces puedes ir —dijo Shouto por fin.

Katsuki asintió y Kenta comenzó a saltar de alegría.

Mina se acercó con una bolsa en la mano —Preparé algo de comida para que el pequeño Kenta no se muera de hambre por su culpa —dijo mientras la entregaba a Denki.

—¿Por qué tengo que cargarla yo? —se quejó el dragón menor.

—Porque ya eres lo suficiente fuerte como para cazar, así que también puedes cargar una bolsa —contestó tranquilamente Mina —, además, Eijiro carga los materiales de captura y no se está quejando.

El mencionado sonrió y se acercó a ellos, luego estiró la mano hacia Denki —Dámela, yo la llevaré, no te preocupes por eso —dijo.

Denki frunció el ceño y apretó la bolsa entre sus brazos —No, yo voy a llevarla —decidió, luego se alejó de ellos.

—¿Qué le pasa? ¿Está molesto conmigo? —se preguntó Eijiro extrañado.

Mina negó con la cabeza —Yo no te puedo decir —contestó, y se alejó del chico confundido.

Hanta, que estaba cerca, se burló de la expresión de Eijiro y también se alejó para que no le preguntara a él.

Katsuki tomó la mano de Kenta y comenzó a alejarse con Eijiro y Denki, mientras el niño agitaba la otra mano para despedirse de los demás.

Shouto suspiró, luego volteó hacia los dragones restantes —Nos vemos —se despidió también y regresó al castillo para buscar a Natsuo e ir juntos a visitar el reino vecino.

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Kenta iba muy feliz. Por fin podía salir a cazar junto a su papi. Su papi era su favorito, también quería a su papá Shouto, pero era demasiado serio y casi nunca jugaba con él porque siempre estaba ocupado; su papi si jugaba y lo cargaba y abrazaba mucho. Lo quería demasiado, así que prefería pasar tiempo con él en vez de estar encerrado en una habitación con su papá mientras lo observaba revisar documentos.

Los demás niños le decían que debe ser aburrido tener un papá como el rey Shouto, que siempre se veía muy serio, y era verdad. A veces quería decirles que no solamente tenía un papá, que también tenía a su papi, y que él lo quería mucho, pero desde muy pequeño le habían dicho que no debía decir que era su papi porque los demás no lo entenderían, que él era el único que tenía dos papás, así que debía mantenerlo en secreto.

Eso le molestaba mucho. ¿Por qué entonces le permitían decir que el rey era su papá? ¿Por qué no era al revés y en vez de ocultar a su papi ocultaba a su papá? Él quería que todos supieran que Katsuki era su papi porque se sentía orgulloso de eso.