Capítulo 12 -Un día especial.

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*Narra MCarmen*

Alguien llamó a la puerta,, no sabía quien era estaba tumbada en mi cama, bueno en la que sería mi cama aquella noche. Me giré dejando el móvil sobre la almoada y vi a Jesús.

-Hola -Me dijo sonriendo.

-Hola, ¿Sabes donde se ha metido Ari? -Le pregunté con una gran sonrisa.

-Ni idea, ¿Y tú has visto a Dani? -Me dijo entrando en la habitación y sentándose en la cama.

Me empecé a reír, no sé si sería de los nervios o yo que sé, pero me entro risa.

-¿Tengo algo en la cara?-Me preguntó con cara de extraño.

Le negué con la cabeza pero me acabé tumbándome otra vez en la cama y con más risa aún.

-¿Entonces?

-Pues que te he conocido, y me he acordado de todas las veces que decía que estaba cogiendo un trauma...-No podía terminar la frase, empecé a reírme otra vez.

-¿Un trauma? -Empezó a reírse también.- ¿De qué?

--Qué siempre le preguntaba a Julia una Gemelier de Jerez, que ya te había conocido en la firma de Sevilla, que si erais muy altos, porque no quería ser más alta que tú. -Jesús al escuchar el nombre de Julia se puso muy serio.- ¿He dicho algo malo? -Jesús estaba en su mundo otra vez.

¿Jesúuus?-Le dije con tono amable a la vez que le movía la mano por la cara.

-¿¡Eh!? ¿Qué te pasa?-Me dijo y empezó a reírse.

-¿Vamos abajo?-Le pregunté.

-Sí jeje, pero no me puedo creer que cogieras un trauma por la altura.

-Jolín es que no quería ser más alta que vosotros,-Dije con tono de niña chica.- bueno...no quería ser más alta que tú.

-Y no lo eres, eres una enana al lado mía.-Dijo riéndose.

-Pero como te...-Le intenté decir mientras le empujaba para que se levantara de la cama.

-Shh. -Me dijo tapándome la boca con su mano.-No te me enfades.

-Pero si me has llamado enana.-Le pude decir al fin cuando ya me hubo quitado la mano de la boca.

-Pero solo eres mi enana en.

-A lo mejor no en.-Le dije poniéndome de pie y acercándome al marco de la puerta.

Jesús se me acercó por la espalda, y me abrazó por la espalda, sé que era mi ídolo pero al ver las fotos de cuando eramos pequeños lo recordé todo, y no era cariño lo que sentía por el, creo que me estaba enamorando.

-Entonces si te hago esto ¿pasa algo?-Me dijo dándome un beso en la mejilla y riéndose.

-Conquístame si quieres, pero te será difícil en. -Le dije con una sonrisa divertida.

-Antes contéstame a una pregunta, aunque seguro que tienes.-Dijo apoyando su cabeza en mi hombro, se quedó callado.

-¿Te comió la lengua el gato?-Le dije riéndome y vi como le salió una sonrisa a el también.

No sé ni como podía estar así de tranquila, estaba hablando con Jesús Oviedo Morilla, como si lo conociera de toda la vida, bueno en parte sí, pero por otra no. Jesús me tenía agarrada por la cintura, y yo como si eso fuera normal estaba allí tan bien, creo que estoy enamorada de este chico pero enserio, ya fuera de fan. La abuela de Jesús nos estaba llamando, al parecer eramos los únicos que faltábamos.

No me doy por vencidaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora