No me doy por vencida

Capítulo 7 -¿Abuela de verdad que los conocías?

LUNES 3O DE JUNIO

El domingo había sido un día muy tranquilo para MCarmen, había ido a Sanlúcar de Barrameda con sus padres a un almuerzo con su familia paterna que es de allí. Le hubiera encantado conocer a dos de sus hermanas a Blanca y a Marina, pero no pudo ser, pero las tres estaban seguras que como se conocieran en el concierto que iba a ser casi seguro se tenían que volver a ver sí o sí.

Pues hoy MCarmen se quedaba en el campo en casa de su abuela, ya que sus padres tenían que trabajar y pasaba de quedarse en su casa sola y aburrida, allí aunque sea podía estar con sus primos pequeños que se quedaban con su abuela hasta medio día. Eran las 10:30 y la abuela de MCarmen la llamó para que la ayudara a preparar el desayuno.

-María ven por favor.-La llamó su abuela.

-Voy, un momento por favor.

MCarmen se levantó de la butaca en la que estaba y se dirigió a la cocina.

-¿En qué te ayuda abuela?

-Toma pon el pan en la tostadora.-Le dice dándole una bandeja con varias rebanadas de pan.- Ah, esta tarde vamos a salir ¿vale?

-¿Esta tarde?-Le pregunta sorprendida a su abuela.

-Sí, sobre las cuatro(16:00) o cuatro y media (16:00), nos lleva tu tía Tere a ver a un matrimonio que hace tiempo que no veo y fui el sábado por la tarde y no tuve tiempo de hablar con ellos, son unos buenos amigos de hace ya muchos años.

-Vale, entonces a esa hora estaré lista. ¿Y dónde es abuela?-Le pregunta interesada, ni ella sabe por qué, no le interesa nada saber donde viven dos personas mayores pero bueno.

-Por la zona de la laguna, han venido ahora, llevaban varios años sin venir y ahora han venido a veranear.

-Ah vale, Abuela esto ya esta ¿no?-Le dice señalando las rebanadas de pan que ya están más que tostadas.

-Sí, quítalos ya y llevaselo a tus primos con la mantequilla y la mermelada.

MCarmen obedeció a su abuela y se le llevó las tostadas a sus primos a la mesa del salón. Ella cogió una de las tostadas y se la untó de mantequilla, sus primos hicieron lo mismo, pero su abuela sustituyó la mantequilla por la mermelada.

El día se le pasó a MCarmen volando, no sabía si era por la pechá reír que se había metido con sus primos o por qué. Pero lo que sí sabía que la hora a la que se tenían que ir se le había venido encima. Ya estaba su tía allí para recogerlas y llevarla a la casa de los amigos de su abuela. Su tía las dejó a dos calles de la casa de aquel matrimonio, porque estaba cerca de la playa y no se podría pasar con el coche de tanta gente que habría.

*Zona de la laguna*

-María, ahí no te aburrirás en. -Le dijo la abuela a su nieta.

-¿Por qué? Jeje.-Le dice a su abuela sonriendo MCarmen.