Como la noche y el dia (Yaoi)

20.5 El ansioso Keiji

---Keiji---

- ¿Que vamos a hacer ahora? -Riku no parece tener hora de llegada. Normal, con ese tipo de tutor.

- Ir a casa de Hiromi estaría bien ¿no? -No me apetece volver a la mía después de esto.

-Pues eso, vamos a su casa.

- Eh, no os auto invitéis -Hiromi tiene el ceño fruncido.

- Cállate Hiromi, por tu culpa han pegado a Gin y a los demás, así que ahora vamos a tu casa si queremos.

- ¿Tu vienes Hina? -Gin la pasó su mano por el pelo. Ella asintió.

- Whooa, me encantan los viernes -Atsushi comenzó a andar y los demás le seguimos.

Mientras andaba, giró su cabeza un poco, lo justo para verme y sonreír, yo le devolví esa sonrisa.

Atsushi y yo estamos saliendo. Llevamos saliendo unas semanas y a el parece que le da igual el día que sea, se presenta a la entrada de la escuela y vamos a mi casa o a pasar el rato a un parque.

Fumamos, jugamos a videojuegos o tenemos sexo. Todavía no me acostumbro a ser el de abajo, pero supongo que si es Atsushi no importa, también esta esa sensación extraña que siento cuando lo hace, es como si quemase.

La casa de Hiromi no estaba lejos, me pasé el camino hablando sobre lo que había pasado esa tarde con Riku también surgió el tema de Shin, sigo sin entender cual es su problema...
Nunca pensé que me iba a llevar bien con él, al principio de curso era sólo el principito de la clase, el que no se reía con mis bromas y yo tampoco le prestaba atención, solía pensar que era un engreído, pero ahora estamos hablando normalmente sobre temas sin sentido y ahora si que se ríe de mis chistes. Y todo esto gracias a Hiromi, que ha venido y ha descolocado todo. Ya no salgo con la gente con la que solía salir, da igual era mala gente y probablemente no me echen mucho de menos, prefiero estar mil veces más con estos idiotas.
Les miro y Hiromi le está pegando un rodillazo a Atsushi por alguna razón, aunque seguro que se lo merece. Cuando me doy cuenta ya estoy sonriendo a la nada.
Al llegar Hiromi no sacó las llaves sino que abrió sin más.

- ¿No cierras nunca con llave, pequeñín? -Gin habla mientras bosteza, como es habitual en el.

- Pensé que iba a llegar con prisa.- Al decir esto miró a Riku por el rabillo del ojo, que tenía las orejas rojas. No puedo evitar reírme.

Todavía quedaban muchas cervezas de la otra vez, deberían haberlas traído en un carrito de la compra. Hiromi ayudó a Atsushi a traerlas y nos sentamos en la mesa.
El peliazul se sentó justo en frente mío, pensé que se iba a sentar a mi lado ¿Que le pasa? Prefiero no darle mucha importancia.
Gin saca un cenicero del cajón de los cubiertos, se sabe todos los escondites ya. De todos modos ¿que coño hace un cenicero ahí? Hiromi tiene un serio problema del orden.
Hina no quiso beber alcohol y eso fue como si diese permiso a Gin para beber todo lo que el quiera, que luego tiraría de el hasta casa. Me cae bien, es muy maja, aunque viste algo ¿como decirlo? ¿Llamativo? Con un montón de lazos, aunque no la queda mal. Tomó prestada la cocina de Hiromi y empezó a hacer un té de algo, si soy sincero no se mucho de tés.

- ¿Que es lo que habéis hecho esta vez?

- Si, si, yo también quiero saberlo. -Riku dio un sorbo a su lata.

- Culpa de Hiromi -Al decir esto me dedica una mirada asesina, yo le devuelvo una sonrisa irónica.

- Se tiró a la novia de uno después de que tuviésemos una pequeña riña con el y sus amigos. -Esta vez es Astushi el que es fulminado con la mirada por Hiromi, aunque rápidamente se giró a ver como reaccionaba Riku.