Como la noche y el dia (Yaoi)

12. Primera cita

Vale, este me ha costado escribirlo y se que apesto haciendo promesas de que si lo subo este día u otro, LO SÉ, ODIADME <3
Pero yo os sigo queriendo neee~

¿QUERÍAS LEMON? TOMAD LEMON luv u.

---Riku---

- ¿Y? ¿Cuál quieres ver?

- Lo que sea menos zombies.

Hiromi me mira fijamente. No se que habré dicho tan raro.

- No querrás ver una romántica...- Dice levantando las cejas.

- ¡Claro que no! -Ni de coña, ni que fuese una chica, aunque mejor que zombies...

Ayer al final no vimos la película. Desde qué llegó, Atsushi se dedicó a intentar abrazar a Keiji y a hacer ruidos raros cada vez que salía un zombie algo asqueroso en la película, así que al final no la pudimos ver. La verdad es que se lo agradezco al peliazul, odio los zombies.
Así que hoy estamos en la cita que me prometió Hiromi. No es raro que dos chicos vayan al cine, así que por mi esta bien.

-Entonces esta.- Hiromi saco las entradas sin darme tiempo a reaccionar.

- ¡Hiromi! ¿Una película de fantasmas? Te dije que nada de eso.

- Tranquilo, te puedes abrazar a mi si tienes miedo...- Sonrió de medio lado.

- Va a empezar pronto así que mejor vamos hacia la sala.

Comenzó a andar y yo le seguí. De verdad ¿en qué esta pensando? Sabe que no me gustan las películas de miedo...
Entramos en la sala cuando ya estaban pasando los anuncios.
Esta casi vacía, supongo que la gente vendrá mañana, que hay descuento. Subimos hacia la esquina de la última fila. No había nadie, las pocas personas que había estaban en las de abajo cerca de la pantalla.

- Oye Hiromi, no hemos comprado palomitas.

- ¿Eh? ¿Quieres? Voy ahora mismo a por ellas. -Se levanta de su asiento. Le agarro fuerte la sudadera.

- No, no te vayas que va a empezar. -Si se va y me quedo sólo cuando empieza voy a morir del miedo.

- Sus deseos son órdenes, alteza. -Hiromi sonrió y se volvió a sentar.

Segundos después de qué Hiromi se sentase, la pantalla se puso en negro. Empieza. Estoy asustado de sólo pensar en que me voy a asustar, la lógica de mi mente.

La primera media hora de la película era historia y no daba miedo, y cuando me empece a relajar, empezaron también los sustos.
¿Él no dijo que me podía agarrar si tenía miedo? Sujeté su mano y apreté con toda la tensión que tenía. La verdad es que me siento mejor ahora.
Hiromi soltó un quejido y también el apretó, ahora mi mano es la que duele. Me soltó y yo le solté a el, no es una buena idea el apretarle la mano, supongo que tendré que aguantarme el resto de película.

Cuando ya me había preparado mentalmente para pasar miedo hasta el final, me volvió a sujetar la mano, esta vez suavemente.
Sus dedos jugaban con los míos y poco a poco me fui olvidando de la película. Se inclinó hacia mi y me besó la mejilla, luego fue bajando hacia el cuello. Soltó su mano y la metió por dentro de mi camiseta acariciando y trazando cada músculo, cada milésima de mi piel, que se erizaba por dónde pasaban sus dedos, y así siguió durante un buen rato. Mi respiración se vuele agitada sólo con el tacto de su piel y el corazón me late como loco.

-Habrá que hacer algo con esto ¿no?- La mano de Hiromi salió de dentro de mi camiseta y sujeto mi entrepierna.

- ¡Ah! H-Hiromi...